El veterano corresponsal de la agencia española EFE, Jorge A. Bañales, junto con su hermano Carlos, que también es periodista, lanzaron recientemente un libro titulado “Todos a Borges” que se basa en el asesinato no resuelto de un funcionario subalterno de la misión militar del Uruguay en Estados Unidos en abril de 1981.
El funcionario uruguayo “apareció muerto de dos balazos en un estacionamiento al frente del edificio de la misión”, dijo Carlos Bañales en una entrevista con El Tiempo Latino, quien comentó que las opciones eran hacer una investigación periodística o escribir un libro de ficción.
“La Policía metropolitana no tenía rastros de ese caso, no había prontuario, no había absolutamente nada. Entonces dijimos, ya está resuelto, vamos a divertirnos mucho más haciendo una novela a partir de esto, no tenemos que andar mendigando testimonios ni buscando declaraciones ni haciendo entrevistas ni nada. Escribimos nosotros la muerte y se acabó, inventamos la historia. Y así nació el proyecto”, puntualizó.
Jorge Bañales afirmó por su parte que “el relato de la novela ocurre en cuatro a cinco días. Hay una cantidad de referencias a hechos y a circunstancias que se vivían en Washington en esa época por ejemplo, la inmigración centroamericana que llegaba, el comienzo de la presidencia de Reagan y los primeros tejes y manejes de lo que más tarde sería la operación de los Contra. Hay una cantidad de elementos reales, como la descripción de lugares, de edificios, diferentes sitios del área metropolitana. Algunas veces me tuve que reubicar en el tiempo y acordarme que en esa época no había teléfonos celulares ni internet, que cuando alguien está en Bethesda y el otro en Washington, no había manera de comunicarse a menos que tuviera monedas para un teléfono público”, subrayó. “El escenario es real, la situación y los personajes son ficticios. Parte de la historia transcurre en Montevideo, con todas las circunstancias, el tipo de gobierno que había en Uruguay y los manejos internos de los militares, pero la obra no intenta ser una descripción de la realidad”, señaló.
El libro comienza con la escena de la muerte de Víctor Borges. A lo largo de la novela el dilema gira en torno a quién mató a Borges, lo cual llevó al nombre de la novela. El encargado de la investigación es un joven detective hispano, que se encuentra en medio de un caso que amenaza con desnudar una trama de tráfico de drogas, armas y torturas que interesa a entidades con sede en la capital estadounidense como el Departamento de Estado, la Agencia Central de Inteligencia (CIA), la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y hasta un influyente coronel con oficina en la Casa Blanca.
El libro, disponible en Palibrio.com, Amazon.com o Barnesandnoble.com., también menciona a los jóvenes de tendencia de izquierda que eran hijos de familias que salieron de Uruguay, Argentina y Chile por los golpes de estado, que eran de clase media y llegaron a trabajar a universidades, organismos internacionales. Asimismo, relata la historia de los desparecidos en esa época.
Al funcionario asesinado lo había contratado la NSA, y una de las posibles razones era por su vinculación con servicio secreto de Estados Unidos, porque sabía mucho”, dijo Jorge Bañales.
“No hubo ningún intento de enviar un mensaje político y, desde el punto de vista literario, la única regla que nos pusimos fue la verosimilitud, que es escribir las cosas de forma tal que el lector diga: esto puede haber ocurrido”, apuntó.