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Sigue alerta por volcán en El Salvador

Las autoridades salvadoreñas intensificaron medidas para monitorear el impacto en la población por la emanación de gases del volcán Chaparrastique mientras que la embajada de El Salvador en Washington llamó a la calma.

Más de 2.200 personas fueron evacuadas tras la erupción del volcán el domingo 29 de diciembre en el departamento de San Miguel, al oriente del país.

En estos momentos, la mayoría ha regresado a sus lugares de origen “a pesar de las recomendaciones de no hacerlo”, dijo en una rueda de prensa en San Salvador, el 1 de enero, el director de Protección Civil, Jorge Meléndez.

La gran nube de ceniza alcanzó entre cinco y 10 kilómetros de altura y se extendió rápidamente, pero las autoridades dijeron que se estaba disipando.  No se han reportado graves daños personales y se evalúa el impacto en la agricultura.

La sede diplomática salvadoreña en DC emitió un “mensaje de solidaridad” en el que indicó que “buena parte” de la comunidad salvadoreña en el área metropolitana proviene de la zona afectada.

“A nuestros compatriotas en Estados Unidos se les hace un llamado a mantener la calma. En caso de ser necesario, se activará un sistema para canalizar ayudas junto con los consulados y organizaciones civiles que siempre nos asisten en este tipo de acontecimientos”, puntualizó el comunicado.

La salvadoreña Yessenia Gómez, residente en Washington, dijo que habló con su madre, quien vive en la municipalidad de Ilobasco, en el Departamento de Cabañas, colindante con San Miguel.

“Mi mamá me contó que todo se puso oscuro por la lluvia de ceniza. A la gente le arden los ojos y varios están usando mascarillas”, dijo Gómez a El Tiempo Latino y añadió que su mayor preocupación y la de su familia era que el volcán continuase lanzando ceniza. Gómez, quien vivió el terremoto de El Salvador en 2001, comparte con sus connacionales una sensibilidad especial hacia cualquier tipo de desastre natural.

El presidente salvadoreño Mauricio Funes visitó el lunes 30 de diciembre la zona afectada. Aunque no ha habido otra erupción, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) advirtió que “se mantiene una situación de riesgo”.

Actualmente la protección civil salvadoreña ha establecido alerta amarilla nacional y alerta naranja en el departamento de San Miguel y municipios aledaños. Aunque se informa que los daños agrícolas son pocos porque las cosechas ya habían sido recolectadas, el sector cafetalero informó que las cenizas afectaron algunos  cultivos del grano.