La embajada de El Salvador en Washington conmemorará el miércoles 29 el XXI aniversario de los Acuerdos de Paz de El Salvador. El evento tendrá lugar en la sede de la embajada, ubicada en el 1400 de la calle 16, NW, Washington DC, a partir de las 6:00 p.m.
La confrontación civil que azotó el país centroamericano y que causó la muerte o desaparición de más de 75.000 salvadoreños a lo largo de 12 años, finalizó tras la firma el 22 enero de 1992 de un armisticio en el Castillo de Chapultepec, en Ciudad de México, entre los representantes del gobierno salvadoreño y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), hoy el partido en el poder.
Como parte de la conmemoración de los Acuerdos de Paz, organismos sociales y de derechos humanos han exigido “justicia y reparación” para las víctimas de la guerra civil de El Salvador(1980-1992) y la derogación de la Ley de Amnistía.
Por su parte, veteranos de guerra de la Fuerza Armada y de la exguerrilla denunciaron que los Acuerdos de Paz han sido violentados por los Gobiernos salvadoreños, ya que no les han brindado la mínima protección.
El presidente de El Salvador, Mauricio Funes, homenajeó recientemente al arzobispo de San Salvador, Oscar Arnulfo Romero, asesinado en 1980 por un francotirador, al bautizar con su nombre el Salón de Honor de la Casa Presidencial.
El Gobierno salvadoreño ha pedido al Parlamento que el aeropuerto internacional El Salvador pase a llevar el nombre del arzobispo Romero.
El FMLN celebró recientemente un acto conmemorativo en el Monumento al Cristo de la Paz, encabezado por su actual candidato para las elecciones del 2 de febrero próximo por la primera magistratura, Salvador Sánchez Cerén, un ex comandante guerrillero y firmante de los Acuerdos de Paz.
“Pido perdón por los daños que les ocasionamos durante el conflicto armado”, reiteró Sánchez Cerén durante su discurso.
La opositora Alianza Republicana Nacionalista, en aquel entonces partido en el Gobierno, no celebró ningún acto conmemorativo.
Sin embargo destacó en un comunicado que la firma de la paz “fue el principio de un nuevo El Salvador” y que, aunque “hay muchos retos que cumplir”, hay que “seguir caminando (…) hacia el futuro”.
Con información de EFE.