Washington, DC.- Corina Guzmán vivirá este 25 de diciembre su primera Navidad en Estados Unidos. La adolescente guatemalteca, quien emigró hace seis meses, lo hará con el corazón dividido: alegre por haberse reencontrado con su padre y la esposa de éste —a quien considera como madre— y su hermanito menor. Pero, al mismo tiempo, melancólica por los abuelos y dos hermanos menores que dejó.
“Me siento feliz y a la vez triste porque a pesar de estar con mi papá extraño mucho a mis abuelitos y hermanitos”, expresó.
Tras casi una década de separación, Corina pudo abrazar a su padre cuando llegó a Virginia el 12 de julio, luego de una travesía de varios días.
Su padre, Carlos Guzmán, aún no cree que su niña esté con ellos. “La llegada de mi hija es un milagro de los muchos que Dios ha hecho en nuestra familia”.
Los dos niños menores del matrimonio permanecen en Guatemala. La familia tiene la esperanza de poder reencontrarse con todos. “Seguimos creyendo que Dios nos va a tener juntos a todos de nuevo”, dijo Guzmán. Quien parece más feliz en este reencuentro es el hermanito menor de Corina, Jared, quien tiene 5 años y nació en este país. “Él está súper feliz con su hermana, la quiere muchísimo y no se separa de ella”, manifestó la madre, Irene Guzmán.
Como muchos de los 54 millones de hispanos en EE.UU, los Guzmán celebrarán la Navidad reunidos con amigos en Nochebuena, con intercambio de regalos y comida típica de sus países.