









Por más de 22 años, DC SCORES ha ofrecido a los niños de menores recursos de DC un programa que combina el fútbol, la poesía y el servicio comunitario, en un espacio seguro en el que se pueden sentir seguros.
Hoy, cuando a estos jóvenes les agobia la incertidumbre por los cambios políticos en la nación, están haciendo sonar más fuerte sus voces para decirle al mundo que sus sueños, ilusiones y la búsqueda de un futuro mejor, no es algo a lo que piensen renunciar.
Y el Concurso de Poesía (Poetry Slam) que realizaron el miércoles 16 en Columbia Heigh Educacional Campus y el jueves 17 de noviembre en la HD Woodson High School en Washington, DC, fueron dos excelentes oportunidades para demostrarlo.
“Trabajamos para dotar a equipos de niños de bajos recursos con herramientas que les ayuden a desenvolverse mejor, todos los días, durante todo el año, en espacios en los que tengan sentido de pertenencia, técnicos adultos que los apoyen, donde no sean juzgados y donde puedan expresarse con libertad, verbalmente a través de la poesía y cuentos de tradición oral y físicamente, mediante el fútbol”, dijo a El Tiempo Latino, Bethany Henderson, directora ejecutiva de DC SCORES.
Y lo mejor de todo, dice, es que los niños tienen que participar en estas tres actividades. “Las habilidades de los jóvenes en la cancha de fútbol se trasladan a las letras, para quienes les gusta escribir, y a las palabras para los que recitan”, explicó Henderson.
“Hay un gran sentido de pertenencia y compañerismo, los que mejor juegan al fútbol están muy orgullosos de sus compañeros que recitan y viceversa. Están muy compenetrados unos con los otros, con los técnicos y conscientes de lo que necesitan aprender y mejorar para ser exitosos en la vida”, destacó la ejecutiva.
Desde 1994, DC SCORES ha prestado estos servicios a más de 9 mil niños en toda la ciudad, incluyendo aquellos en los barrios de alta población latina como Columbia Heights y Petworth. “Eso es algo que no va a cambiar”, afirmó. En la actualidad, la organización sirve a unos 2.200 niños, de los cuales más del 40% son latinos.
Henderson subrayó que “éste no es un programa que los niños realizan por solo un semestre o un año” y destaca el hecho de que la mayoría de ellos asisten durante su época escolar entre el 3ro y el 8vo grado. “Es por eso que se identifican plenamente con la organización”, subrayó.
En el 19no Concurso Anual de Poesía, más de 500 niños de 55 escuelas y centros recreacionales mostraron sus cualidades artísticas enfrente del público y sirvió como ejemplo del impacto que los programas de DC SCORES han tenido en sus vidas.
En estos días difíciles, la esperanza y motivación son esenciales, siendo esta tribuna el mejor escenario para estos niños en DC en edades comprendidas entre 8 y 14 años, para poder expresarse libremente, con poesía original.
Ellos dijeron en sus recitales cómo las elecciones los están afectando, sus esperanzas, temores, sueños y ansiedades sobre el futuro. “Hemos estado apoyando a estos niños por 22 años y eso es algo que no va a cambiar. Vamos a seguir aquí para ellos. Hoy más que nunca los niños están más solidarios, reescribieron algunas de sus poesías, para expresarse sobre las preocupaciones que les surgieron a ellos y sus familias después de las elecciones. Los técnicos han estado ahí y los han escuchado, ayudado a procesar la información y superar esta situación”, anotó.
“Nosotros somos todos gente” expresó uno de los grupos desde el escenario. “No dejes que el racismo nos aparte, seas blanco o negro, nosotros deberíamos tratar a todos por igual”.
Una inquietud que Bethany Henderson, los demás miembros de la Junta Directiva de DC SCORES, así como el técnico del DC United, Ben Olsen, presente el miércoles en Columbia Heights y Víctor Melara, el gerente de relaciones con la comunidad hispana de ese club, también comparten.
Es que hay mucha incertidumbre, muchos de los atletas-poetas y sus familias están asimilando el miedo y la ansiedad sobre su futuro, particularmente para los inmigrantes jóvenes y peor aún para los que tengan padres indocumentados. El Poetry Slam les vino muy bien.
“Es un programa de 12 semanas que se basa en una combinación de escritura de poemas y cómo usarlos para expresar sus pasiones, el ambiente y las cosas que los motivan, lo hacen en grupos y reciben ayuda de expertos. No puedo expresar lo bueno que esto es. Muchos de los equipos añaden música, arte y están ahí las familias de los niños, apoyando y es impresionante la celebración”, concluyó.