En sesión celebrada este viernes, la Cámara de Representantes de Estados Unidos votó a favor de convertir a Washington DC en el estado 51 del país, un hecho que podría encontrar freno en el Senado, de mayoría republicana.

Con 232 votos a favor y 180 en contra, la instancia, de mayoría demócrata, aprobó el proyecto de ley HR 51.

El jueves, durante un acto celebrado junto a Muriel Bowser, alcaldesa de DC, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, aseguró que “durante más de dos siglos, a los residentes de Washington DC se les ha negado su derecho a participar plenamente en la democracia y (…) corregiremos esta grave injusticia”.

Por su parte, Bowser manifestó que sus residentes, calculan en más de 700 mil, están privados de derechos al no contar con un espacio en el Congreso de Estados Unidos: “este es un error histórico. Debe corregirse”, comentó. “Nací aquí sin voto (en el Congreso), pero juro que no moriré aquí sin voto”, agregó.

La discusión sobre la posibilidad de convertir a Washington DC en estado tomó fuerza en las últimas semanas tras las posturas alejadas entre Bowser y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, respecto a las manifestaciones desatadas en la capital del país a raíz del asesinato de George Floyd, afroamericano de 46 años de edad, víctima del excesivo uso de la fuerza por parte del agente de la policía de Minneapolis Derek Chauvin el pasado 25 de mayo.

Las protestas, en su mayoría pacíficas, encontraron en Trump una respuesta que involucró el uso de la Guardia Nacional. Aunque Bowser solicitó su retiro, el mandatario mantuvo a los efectivo por varios días.

Tras el hecho, Bowser dijo que “es cierto que en DC somos más de color y somos más liberales que otros estados. Sin embargo, la cuestión de pagar impuestos sin tener representación se resolvió hace más de 200 años a través de la Declaración de Independencia, y privar de sus derechos a más de 700,000 estadounidenses que pagan impuestos está mal independientemente de nuestra política o composición demográfica. Es nuestro asunto decidir a quién elegimos y denegarnos la estadidad con base en la representación que podríamos tener en el Congreso es anti-democrático y anti-americano.

Ahora, así como generaciones de estadounidenses han trabajado durante siglos para construir una unión más perfecta, nosotros también estamos listos para aprovechar este momento. Hoy, estamos sobre los hombros de generaciones de habitantes de Washington, DC que exigieron el acceso a la democracia de nuestra nación, desde los abolicionistas de los años 1800s hasta los activistas por un gobierno autónomo de los años 1900″.

últimas noticias


Sucesos

El caso de Hickman's Family Farms

MS-13: "Te unís o te morís"


Política

La representante Tricia Cotham deja el Partido Demócrata para unirse al Republicano


Nacional

En Florida preparan ley contra los periodistas y medios de comunicación