WASHINGTON.— El concejal Canek Aguirre calificó este martes como una “bofetada” la decisión del presidente, Donald Trump, de abandonar las negociaciones para otro plan de estímulo económico que ayude a las familias trabajadoras, los desempleados y los pequeños negocios.
Desde su cuenta en Twitter, Trump afirmó que no apoyará ningún acuerdo para un plan de reactivación económica sino hasta después de que “gane” la reelección en noviembre próximo, y nuevamente culpó a los demócratas de querer beneficiar a estados bajo su control con un “rescate” de 2,4 billones de dólares.
El anuncio mandó al congelador las negociaciones que durante semanas han liderado la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, sobre un plan de reactivación que incluya otra ronda de cheques directos, ayudas para los pequeños negocios, la ampliación de los subsidios de desempleo y de las pruebas de diagnóstico, entre otras medidas.
La Cámara Baja, bajo control republicano, aprobó la semana pasada una versión modificada de su proyecto de ley “Heroes Act”, que ya había aprobado en mayo pasado, pero ésta tampoco tiene apoyo republicano.
En entrevista con El Tiempo Latino, Aguirre, concejal de Alexandria, Virginia dijo que el anuncio de Trump es una “bofetada no solo para la comunidad latina sino también para todo el país”.
“Si entendiera lo que está pasando con las familias, especialmente las familias latinas aquí en Virginia, sabría que estamos sufriendo bastante, no solo por el impacto de COVID-19, el desempleo o la falta de seguro médico… si tuviera un poco de empatía, estaría tratando de ayudar a nuestras familias, y no lo está haciendo”, argumentó Aguirre, de origen mexicoamericano.
Demócratas enfocados en ganar Virginia
Por otra parte, Aguirre expresó optimismo sobre la posibilidad de que su partido gane el estado de Virginia en los comicios generales del próximo 3 de noviembre. Virginia, que tiene 13 votos en el Colegio Electoral, apoyó a Hillary Clinton en 2016, y antes a Barack Obama, en 2012.
Un promedio de encuestas nacionales de Real Clear Politics demuestra que el aspirante presidencial demócrata, el ex vicepresidente, Joe Biden, aventaja a Trump 51,2% contra 42,2%. Mientras, un promedio de encuestas de “270towin.org” realizadas en Virginia coloca a Biden con una ventaja del 50,5% contra el 41% que obtiene Trump.
“Estamos tratando de establecerlo completamente como un estado ´azul´ (de dominio demócrata) que se decante por Joe Biden este año, y su campaña ha dedicado muchos recursos acá en Virginia para asegurar eso”, explicó Aguirre, quien ganó el puesto de concejal en la llamada “ola azul” de 2018.
“No estamos dando por hecho ningún voto, especialmente el voto latino”, que puede ser decisivo en contiendas reñidas, agregó el concejal.
Los latinos conforman aproximadamente el 10% de la población en Virginia y, según un mapa interactivo del Centro de Investigación Pew, el 5,5% del electorado. En contiendas que se definen por un puñado de votos, los latinos podrían marcar la diferencia.
Aguirre dijo estar consciente de que en otros estados hay esfuerzos de supresión del voto de las minorías, pero en Virginia “hemos tenido mucha suerte”, porque la Asamblea Estatal, bajo control demócrata, ha tomado medidas para incluso ampliar los centros de votación y facilitar el proceso del sufragio.
El líder político afirmó que asuntos como la reforma policial, la educación, el cuidado médico, y la creación de empleos son los que movilizarán a los hispanos a las urnas, especialmente porque la pandemia del COVID-19 ha afectado casi todas esas áreas.
Biden ha estado visitando con frecuencia los estados clave de la contienda –el martes 6 de octubre estuvo en Gettysburg (Pensilvania)- adonde ha trasladado su mensaje de que en esta contienda está en juego “el alma de la nación” y la “unificación” del país.
También Biden advirtió de que, a su juicio, a Trump “no le importa” que la gente pierda sus empleos, cierre sus negocios, o no pueda enviar a sus hijos a la escuela debido a la pandemia, y condenó que, en vez de un plan económico, el mandatario centre sus esfuerzos en la aprobación de una jueza conservadora en el Senado.
Su campaña lanzó el martes 6 de octubre tres anuncios en español e inglés en once estados clave, entre estos Virginia, en los que afirma que su compañera de fórmula, Kamala Harris, ha sido “aliada” de la comunidad latina, destaca los valores de “fe y familia” que Biden comparte con los hispanos, y promete luchar por sus intereses.
“Necesitamos a un líder que nos escuche, que impulse medidas que nos ayuden a sobresalir como comunidad”, afirmó.
Aguirre consideró que las diferencias entre Biden y Trump, tanto por sus políticas como su visión de futuro para el país, no podían ser más abismales.
Cuando Trump lanzó su candidatura presidencial en 2015 con una retórica anti-inmigrante, “no solamente insultó a mis papás y al resto de mi familia sino también a todos los latinos, y no veo cómo vaya a ser distinto”, observó.