Las escuelas cerraron en el condado rural de Dorchester en la costa este de Maryland esta semana, en medio de un aumento en los casos de coronavirus; más de un mes después de que los estudiantes comenzaron un regreso gradual a las clases presenciales.
El condado es el primero en suspender el aprendizaje en el aula en Maryland, desde que los funcionarios estatales comenzaron a instar a los sistemas escolares, a fines de agosto, a reabrir los edificios escolares para el otoño.
El superintendente de las escuelas del condado de Dorchester, W. David Bromwell, dijo que alrededor de 20% de los 4 mil 700 estudiantes del sistema escolar estaban en el campus a tiempo parcial.
“Estábamos bien y avanzábamos lentamente”, comentó. Pero un aumento repentino en la propagación del coronavirus detuvo el plan.
Hasta el viernes, Dorchester lideró el estado en cuanto a casos nuevos por cada 100 mil habitantes durante los últimos siete días, con 251, según datos compilados por The Washington Post.
Leer más: Aumentan las hospitalizaciones por COVID-19 en 38 estados de EE.UU.
La tasa de positividad de coronavirus saltó del 2,9% al 6,1% en un período de ocho días, informó Roger Harrell, oficial de salud del condado de Dorchester.
El virus no se ha propagado en las escuelas, aseguraron los funcionarios escolares y de salud. Llamaron al cierre una medida de precaución tomada para prevenir un brote escolar.
“La parte aterradora es la rapidez con la que cambió -la tendencia- y parecía estar creciendo exponencialmente (…) Simplemente parece que está afectando a las zonas rurales de Estados Unidos”, señaló Bromwell.
El aumento no se ha relacionado con un evento o brote en particular en ninguna parte del condado y ha afectado a personas de todas las edades, explicó Harrell. El condado incluye la ciudad de Cambridge, en medio de una extensión de tierras de cultivo y vías fluviales.
Recomendamos leer: ¿En qué lugares hay mayor riesgo de contagio de COVID-19?
“Realmente no hemos descubierto por qué (…) Ojalá tuviéramos la respuesta mágica, pero todavía no la tenemos”, añadió el oficial de salud del condado.
Se necesitará registrar, al menos durante dos semanas, tasas de positividad consistentemente más bajas antes de que las escuelas puedan reabrir.
En los últimos meses, el gobernador Larry Hogan y la superintendente estatal Karen Salmon han visitado escuelas de todo el estado, elogiando los esfuerzos para reactivar las clases en el aula.
Hogan dijo a finales de agosto que los sistemas escolares estaban completamente autorizados para comenzar a reabrir de manera segura para las clases en persona, basándose en la mejora de las métricas de salud.
Traducción libre del inglés por El Tiempo Latino.
Fuente: The Washington Post.
