Por décadas el verdadero nombre del niño, en el cual se inspiró la película de terror El Exorcista de 1973, fue un misterio. Solía tener el seudónimo de Donald Doe, pero se descubrió su identidad y el cómo fue un ingeniero exitoso en la NASA hasta que murió el año pasado en Maryland.
Lo último: Una investigación de la revista estadounidense The Skeptical Inquirer dio pruebas de como el niño de 14 años, que según la iglesia católica ameritó un exorcista por ser víctima de una posesión demoníaca, realmente se llamaba: Ronald Edwin Hunkeler.
- Nacido en 1935, en Cottage City, fue un ingeniero de la NASA cuyo trabajo contribuyó a las misiones espaciales Apollo de la década de 1960 por patentar una tecnología resistente al calor extremo.
- Se retiró en 2001 después de 40 años en la institución científica y murió en 2020, un mes antes de cumplir 86 años, a causa de un derrame cerebral en Marriottsville, Maryland.
Lo que dicen los medios: Según una fuente de New York Post, Hunkeler siempre temió que sus colegas de la NASA descubrieran que él fue la inspiración para El exorcista.
- La fuente por ellos citada, asegura que en Halloween él evitaba salir porque pensaba que alguien podría identificarlo y conseguir su residencia.
- Antes de fallecer un sacerdote visitó a Hunkeler repentinamente para el sacramento de la extremaunción o unción de los enfermos.
- “No tengo idea de cómo supo el padre que tendría que venir, pero llevó a Ron al cielo. Ron está en el cielo y ahora está con Dios ”, dijo la fuente al New York Post.
El contexto: William Peter Blatty, quien escribió la novela de 1971 y la película basada en el mismo nombre, escuchó por primera vez sobre la aparente posesión demoníaca de Hunkeler cuando era estudiante de último año en la Universidad de Georgetown en Washington DC.
- Un profesor que también era sacerdote en Georgetown -Universidad católica- le comento sobre las posesiones del niño.
- En el pueblo de Maryland dónde nació la familia empezó a registrar las actividades “paranormales”.
- El reverendo, Luther Schulze, fue el religioso que finalmente escribió al Laboratorio de Parapsicología de la Universidad de Duke, en Carolina del Norte, en marzo de 1949.
- En esos informes el religioso explicaba que las sillas, cama y hasta una imagen de Cristo en la pared, se movían cuando se aparecía el niño, entrego otros fenómenos.
Ello hizo que recibiera atención de un exorcista jesuita, William Bowdern, quién le practicó más de 20 rituales en tres meses y luego paso un largo período en un hospital. No se supo de nuevos problemas en él después de ello.
Fuente principal de la noticia: The Guardian.