No solo los niños vuelven a la escuela, los padres de familia también. Ponga en el calendario una invitación que ni usted ni sus hijos tienen excusa para perdérsela. Esta cita es conocida como back to school night o la noche de regreso a clases y casi, sin excepción, todos los planteles de educación organizan una o dos semanas después de la apertura del nuevo año escolar.
En la agenda de Washington DC, el back to school night ya está visible en el portal de las escuelas públicas locales. Sin duda también recibirá un email o un WhatsApp invitándole a reunirse con los maestros de sus hijos para saber cuáles son las expectativas que se esperan de sus niños y también para decir cuáles son las suyas. En Maryland y Virginia cada escuela tiene su calendario, en algunas de ellas esta cita será virtual.
“El back to school night nunca lo debemos tomar a la ligera. Ese encuentro marcará el principio de una relación de un año con la maestra que tendrá su hijo si va por primera vez a la escuela o si pasa a otro grado”, así explica Dinorah Olmos, fundadora y presidenta del Latino Education Advancement Fund (LEAF).
Cada año cambia el maestro, el pénsum de estudios y el aula. Esa es la mejor ocasión para conocer a las autoridades y hasta presentarse al director del plantel. Olmos escenifica un corto diálogo, el mismo que les recomienda a los padres latinos durante los talleres de orientación en español que realiza el LEAF: “Buenas noches, estos son mis hijos, Julián y de Martita, que van al tercer y quinto grado”. No necesita decir más, “el canal de comunicación ya queda abierto”, asegura Olmos.
Back to school night. Cita para crear un puente
En algunos planteles de kindergarten, de primaria y secundaria de DC comenzarán a reunirse en a partir de esta semana. El Back to School tiene nombres diferentes. En algunos planteles se llama noche informativa para los padres, noche curricular, noche de casa abierta o venga a conocer al maestro esta noche. Independientemente del nombre, el propósito es el mismo: crear el puente entre la escuela y la casa para juntos cumplir las metas académicas del estudiante.

“Nunca me pierdo la cita del regreso a clases y a veces me acompaña mi esposo. Al menos es el momento para conocer a los maestros que les van a tocar a mis hijos y el aula donde van a estudiar”, dice Magdalena Escobar, madre de tres estudiantes en el área de Greenbelt. “Lo positivo es que nos conocemos con otros padres de familia, compartimos contactos para ayudarnos entre nosotros con la educación a nuestros hijos”, agregó.
Cuando uno de sus hijos está “un poquito bajo en notas”, Escobar llama a la profesora para preguntarle cómo puede ayudar. “Uno de ellos tiene trastorno de déficit de atención y cada año le hacen evaluaciones, por eso siempre estoy pendiente de la escuela”, señaló.
“Educar a los hijos es un trabajo en equipo y el back to school night es ideal para decirle al maestro qué espera usted de la escuela, para preguntarle qué aprenderá su niño durante el año, si tendrá tareas para hacer en casa”, dijo Olmos. Si el profesor no le dice pregúntele: “¿Qué debo hacer yo para ayudar en la educación de mi hijo?”, es otra de las recomendaciones de Olmos.
La educación es una inversión
Si ya tiene asumido que no hay pretextos para perderse esta cita, prepárese antes de ella. Anote en una libreta las preguntas que le gustaría hacerle al profesor. En caso de que su niño tiene una enfermedad, enliste las medicinas que toma, los alimentos que no debería comer, las actividades físicas permitidas, las áreas de estudio en las que necesita refuerzos o cuál es la mejor manera de contactarlo al maestro. En caso de que no domine el inglés pida ayuda para la traducción.
Nunca es tarde para involucrarse en la educación de sus hijos, pero mejor si se compromete desde edades tempranas. Una buena forma de empezar es asistiendo a la cita del back to school night, porque es lo más probable que el maestro presente su plan de estudios, sus expectativas, su calendario de tareas para hacer en casa y los plazos límites de entrega o los reglamentos del uso del celular en clases.

Por ejemplo, en muchas escuelas hay más de uno o dos grados del mismo grupo, por eso muchos padres piden de antemano referencias de los maestros. Si hay uno que les gusta solicitan, por escrito, que su niño se lo ponga con ese profesor. “No quiere decir que le van cumplir el deseo, pero lo que cuenta es que están abogando por la educación de sus hijos”.
Con las reglas expuestas y todos avisados no será justo preguntarse después por qué su hijo tiene un B en vez de un A. “Recuerde que en este encuentro se abre un canal de comunicación para que no haya sorpresas”, asegura Olmos, quien inste en no justificar perderse la reunión de la escuela para no perder horas de trabajo y dinero. “Tienen que pensar que la educación es una inversión a futuro. Desafortunadamente, muchos padres no lo ven así”, se lamentó.
Te podría interesar leer:
Vuelva a clases con la lista de vacunas completa
Biden perdonará 39 mil millones de dólares en préstamos estudiantiles