Tesla, empresa dominante en el sector de los vehículos eléctricos, registró una reducción del 9% en los ingresos del primer trimestre de 2024, lo que representa el descenso más significativo desde 2012 y no cumple las previsiones de los analistas.
La empresa ganó 45 céntimos por acción con unos ingresos de 21.300 millones de dólares, por debajo de los 51 céntimos y 22.150 millones de dólares previstos.
Este descenso forma parte de una tendencia más amplia a principios de año, con una drástica caída del 55% en los ingresos netos hasta los 1.130 millones de dólares.
Posible solución de Elon Musk para elevar los ingresos
En respuesta a estos retos financieros, el consejero delegado Elon Musk anunció un cambio estratégico durante la llamada de resultados.
Tesla planea iniciar la producción de nuevos vehículos eléctricos más asequibles a principios de 2025, comenzando potencialmente tan pronto como a finales de este año, antes de lo previsto anteriormente.
Luego de que Musk anunciara esta nueva estrategia las acciones de Tesla subieron un 13%, este movimiento indica un fuerte empuje para recuperar el impulso.
Los ingresos de Tesla por la automoción también sufrieron un golpe, cayendo un 13% interanual hasta los 17.380 millones de dólares.
En estos totales se incluyeron los ingresos procedentes de ventas anteriores de la opción de conducción autónoma completa (FSD), que, según el analista de automoción Chris Redl, de Siena Capital, permitieron a Tesla reconocer unos 700 millones de dólares en ingresos diferidos, lo que supone el 4.3% de sus ingresos de automoción tras ajustar los créditos reglamentarios.
Tesla sigue sorprendiendo
A pesar de estos reveses financieros, Tesla sigue adelante con sus innovaciones. Musk destacó las inversiones en curso en inteligencia artificial y las posibles asociaciones con un gran fabricante de automóviles para obtener la licencia de la tecnología FSD de Tesla.
Además, la empresa está perfeccionando sus líneas de producción actuales para dar cabida a los nuevos modelos de vehículos sin la necesidad inmediata de nuevas instalaciones de fabricación.
La presentación de la empresa a los accionistas pintó un panorama cauteloso para 2024, proyectando una tasa de crecimiento del volumen "notablemente inferior" a la de años anteriores.
Sin embargo, Musk tranquilizó a los inversores sobre un rendimiento potencialmente más fuerte en el segundo trimestre, a pesar de desafíos como las interrupciones de la cadena de suministro en la zona del Mar Rojo.
Reducción de personal y resistencia de Tesla tras perdidas
Tesla también está llevando a cabo una reestructuración, que incluye la dimisión de dos ejecutivos y una reducción de plantilla superior al 10%, según se detalla en un reciente memorándum de Musk. Esta reestructuración pretende racionalizar las operaciones y recortar los costes de forma eficaz.
Además, la división de energía de Tesla registró un aumento de ingresos del 7%, hasta 1.640 millones de dólares, y sus servicios y otros sectores de ingresos crecieron un 25%, hasta 2.290 millones de dólares, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
A pesar de la recesión financiera general, estos segmentos demuestran áreas de crecimiento potencial y resistencia.
Mientras Tesla navega por estos tiempos difíciles, el calendario acelerado para el lanzamiento de vehículos eléctricos más asequibles podría ser el pivote estratégico para mantener su liderazgo en el mercado de vehículos y aumentar la confianza de los inversores.
Con la evolución del panorama de los vehículos eléctricos, los ajustes de Tesla muestran una respuesta dinámica a las demandas del mercado y a las presiones internas.
