La pareja de actores Angelique Boyer y Sebastián Rulli, sorprendieron a los fans con la revelación de que no viven juntos, apesar de llevar una década de relación.
Desafiando las normas convencionales, Boyer y Rulli adoptan un enfoque poco convencional de su relación. Aprecian el "amor libre", que les permite alimentar un vínculo sólido sin las formalidades de los lazos legales.
En el popular programa "El Gordo y la Flaca", presentado por Lili Estefan y Raúl de Molina, compartieron impresiones sobre su dinámica poco convencional.
Durante la entrevista, Boyer y Rulli revelaron su sorprendente acuerdo: a pesar de su larga relación, no viven juntos. "Él llega a su casa, yo llego a la mía, y todos estamos muy contentos", comentó Boyer.
Angelique Boyer y Sebastián Rulli sorprendieron tras confirmar que no viven juntos
Rulli añadió: "Está la casa de ella, mi casa y nuestra casa. Cuando trabajamos, nos vemos menos que cuando no trabajamos". Los presentadores se mostraron sorprendidos, cuestionando la autenticidad de su relación.
Su franqueza desafía las expectativas tradicionales sobre las relaciones románticas. Boyer y Rulli se oponen sistemáticamente a los roles convencionales, sin mostrar ninguna intención de casarse o tener hijos.
Su relación adopta el modelo "Living Apart Together" (LAT), que resalta el mantener una relación afectiva mientras residen por separado.
Este modelo les permite la libertad de cultivar su independencia al tiempo que aprecian los momentos que pasan juntos. El equilibrio que mantienen hace que su relación prospere.
La relación de Boyer y Rulli sirve de faro para redefinir las normas románticas. Destacan la importancia de la felicidad personal y el respeto mutuo por encima de las convenciones sociales.
