El bloque demócrata anunció hoy que brindará su apoyo al republicano Mike Johnson, orador de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, frente a posibles amenazas de destitución por parte de miembros radicales de su propio partido.
Esta decisión llega tras la controversia generada por la aprobación de un considerable paquete de ayuda económica para Ucrania, valorado en 61.000 millones de dólares, como parte de un fondo aún mayor que asciende a los 90.000 millones.
La medida provocó descontento en ciertos sectores del Partido Republicano, liderados por la congresista Marjorie Taylor Greene, conocida por sus posturas extremas.
“En este momento, una vez finalizado nuestro trabajo de seguridad nacional, ha llegado el momento de pasar página de este capítulo de obstrucción republicana proPutin. (...) Si ella invoca la moción (de dejar vacante la presidencia), no tendrá éxito”, escribieron los líderes del Partido Demócrata en la Cámara Baja a través de un comunicado.
La fuerte postura de Green contra Mike Johnson
Greene, conocida por su apoyo incondicional al expresidente Donald Trump, expresó rápidamente su grave descontento, amenazando con iniciar una moción de censura contra Johnson.
Criticó duramente su decisión, argumentando que mientras algunos celebraban la ayuda a Ucrania agitando su bandera, se estaban pasando por alto cuestiones críticas como la seguridad fronteriza de Estados Unidos. "Esto debería enfurecer a todos los estadounidenses; se están ignorando nuestras propias necesidades", afirmó.
Además de la ayuda financiera a Ucrania, el paquete incluía soporte a Israel y Taiwán, así como fondos de ayuda humanitaria para poblaciones en riesgo en Gaza, Haití y Sudán.
La aprobación de estos fondos, por un conteo de 311 votos a favor frente a 112 en contra, con una mayoría de oposición proveniente de los republicanos, escaló a un punto crítico en el que la posición de Johnson como presidente de la Cámara estaba bajo amenaza de ser revocada.
De esta manera, se replica el escenario que previamente despojó de su cargo a Kevin McCarthy. En medio de la tormenta que se avecinaba, figuras como Thomas Massie y Paul Gosar manifestaron sus intenciones de destituir a Johnson.
El audaz apoyo demócrata a Mike Johnson pese a las diferencias
A pesar de estas tensiones internas, los demócratas ofrecieron preventivamente su apoyo a Johnson, sofocando eficazmente el impulso de cualquier voto de censura antes de que pudiera materializarse.
Su apoyo se extiende por encima de profundas brechas ideológicas, teniendo en cuenta las creencias evangélicas de Johnson, su postura contra el aborto y los derechos LGBTQ, y su respaldo a las acusaciones infundadas de Trump sobre el fraude en las elecciones presidenciales de 2020.
El líder demócrata Hakeem Jeffries, tras consultar con su bancada, afirmó:
"Después de que hayamos completado las tareas esenciales de seguridad nacional, tenemos que superar este capítulo de interrupciones republicanas pro-Putin". Estamos preparados para bloquear el intento de la congresista Greene de desafiar al liderazgo. Está destinada al fracaso".
El líder demócrata Hakeem Jeffries
Las palabra de Green
En reacción a la postura demócrata, Greene se lanzó a Twitter, cuestionando los compromisos no revelados que Johnson podría haber hecho para obtener el respaldo demócrata e insinuó que Johnson debería dimitir o cambiar de partido.
A pesar de reconocer la probable derrota de su moción, Greene se mantuvo inflexible, prometiendo sacar a la luz lo que denominó "el Unipartido en acción".
Mientras los republicanos lidian con sus fracturas internas con la vista puesta en las próximas elecciones, los demócratas han aprovechado estratégicamente las oportunidades de trabajar con los republicanos moderados.
Esta colaboración facilitó movimientos legislativos cruciales, como elevar el techo de la deuda y aprobar importantes resoluciones presupuestarias y de ayuda.
