Mateusz Morawiecki, primer ministro de Polonia, anunció el miércoles que el país interrumpirá su suministro de armas a Ucrania.
Esta decisión es consecuencia de la escalada de la disputa en torno a las exportaciones de grano, que ha provocado tensiones entre Ucrania y Polonia, uno de los principales apoyos de Kiev en su lucha contra la agresión rusa.
Los ataques de Rusia contra el vital sector agrícola ucraniano, que incluyen bombardeos continuos de instalaciones cerealistas e interrupción de las rutas marítimas del Mar Negro, han obligado a Ucrania a explorar canales de exportación alternativos.
Sin embargo, Polonia y otras naciones vecinas han iniciado una prohibición de las importaciones para proteger a sus agricultores nacionales de una avalancha de grano ucraniano a bajo coste. Este desacuerdo alcanza su punto álgido cuando Polonia se prepara para las elecciones del 15 de octubre.
Varsovia planea dejar de ayudar militarmente a Ucrania a reforzar sus propias defensas, según declaró el primer ministro en una reciente entrevista con Polsat News. "Defenderemos nuestra nación. Ya no enviaremos armas, pues ahora nos equiparemos con las armas más avanzadas", agregó.
Tenciones entre Polonia y Ucrania
La semana pasada, Polonia, Hungría y Eslovaquia reafirmaron su actual prohibición de importar grano ucraniano, tras la rescisión de un acuerdo de la Unión Europea (UE) destinado a salvaguardar a los agricultores locales.
El levantamiento de este embargo avalado por la UE se produce justo un mes antes de las elecciones polacas, en las que el partido populista de derechas Ley y Justicia, que aboga por los agricultores polacos, se esfuerza por mantener el poder.
En represalia, las autoridades ucranianas prometieron iniciar acciones legales contra Polonia, Hungría y Eslovaquia para anular el embargo. Pero, las perspectivas de una resolución rápida parecen prácticamente inexistentes.
Polonia es el sexto mayor proveedor de ayuda militar a Ucrania y ha acogido a más de 1,5 millones de refugiados.
Las recientes insinuaciones del presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, en la Asamblea General de las Naciones Unidas de que Polonia está ayudando indirectamente a Rusia han provocado la indignación de Varsovia.
En respuesta, Morawiecki convocó al embajador ucraniano y denunció los comentarios de Zelensky como "palabras duras", que Polonia rechaza "fundamentalmente".
Aunque hay protestas nacionales contra las importaciones baratas de grano ucraniano, los expertos siguen cuestionando el impacto de un embargo, ya que los precios se ven afectados en gran medida por las fluctuaciones del mercado mundial y no por las condiciones locales.