El Observatorio Venezolano de la Conflictividad Social (OVCS) registró 5.315 protestas en los primeros seis meses del año: 8% más que en el mismo lapso de 2017. Los trabajadores, especialmente los de la salud y el transporte, se movilizaron para expresar su descontento; entretanto, continuaron las acciones de calle contra el colapso de los servicios públicos y la escasez de alimentos y medicinas.
Al “presidente obrero” (Nicolás Maduro) se le está alzando la clase obrera y la evidencia es que de las 5.315 protestas que registró el OVCS, 84% exigió el cumplimiento de derechos laborales, sociales, económicos, sociales y ambientales, que son violados por las malas políticas del gobierno.
En la primera mitad del año hubo un promedio de 30 protestas por día y se registraron 12 fallecidos, seis de los cuales se produjeron en medio de saqueos y los restantes en cierres de calles reprimidos por fuerzas policiales.
Pese a que el país no muestra el mismo nivel de tensión social que había a principios de 2017, cuando la movilización perseguía objetivos políticos, el OVCS indica que los niveles de conflictividad tienden a crecer debido a la precariedad social en la que viven los venezolanos.
Junio fue el mes de este año con más protestas, con un total de 1.122 movilizaciones, motivadas por conflictos laborales de los sectores de Salud y Transporte, además del deterioro de servicios públicos esenciales.
Fuente: La Patilla