La peruana Valeria Catacora- Sullivan y la colombiana Paula Pacheco-Ramírez tienen 11 años de diferencia, pero muchas cosas en común. Ambas acaban de ser madres hace un año y pronto darán a luz a su segundo bebé varón. Las dos pertenecen a una generación muy peculiar: los millennials o milenios, en español.
Catacora-Sullivan, de 22 años -quien se crió en Virginia y ahora vive en Texas- y Pacheco, de 31 años, -que emigró al área de Washington a los 13 años- son parte del grupo de madres del milenio que crece rápidamente, superando los más de 17 millones en Estados Unidos, según el Centro de Investigaciones Pew.
“Me siento muy feliz de ser mamá y estoy ansiosa esperando a mi segundo bebé”, expresó Catacora-Sullivan a El Tiempo Latino.
Cada año, el promedio de mujeres del milenio que se convierten en madres son más de un 1 millón, dice la investigación de Pew. Para ser más precisos en 2016, 1 millón 200 mil milenarias fueron mamás por primera vez.
Catacora-Sullivan está programada a dar a luz a finales de este mes de mayo. “Tengo 38 semanas de embarazo y ya estamos preparados”, manifestó la joven.
Pacheco-Ramírez dará a luz en septiembre. “Ya sabemos que será un hombrecito también”, dijo.
Si bien se ha dicho que los “millennials” son menos propensos a convertirse en padres, lo cierto es que están sumando más nacimientos a la cifra que había bajado en Estados Unidos y sus bebés representan el 82 por ciento de nuevos alumbramientos. En 2016, ocho de cada 10 bebés nacieron de madres milenarias.
¿Quiénes son estas madres?
Aunque no hay una definición exacta de quienes son la generación del milenio, se concluye que está conformada por jóvenes que nacieron entre mediados de la década de los 80 y finales de los 90. Sus edades fluctúan entre 20 y 35 años, según algunos expertos. Las madres milenarias —que nacieron en la era digital, con el teléfono, computadora y redes sociales bajo el brazo— tienen características muy peculiares que las distinguen de otras generaciones.
Esperan más para ser mamás
Comparada a la generación anterior, Generación X —que nacieron entre 1965 y 1980—, las millennials tienden a esperar más tiempo para convertirse en mamás por primera vez. Según el estudio de Pew, en 2016, solo el 48% de las mujeres milenios dieron a luz por primera vez, en comparación con el 57% de mujeres de la Generación X.
Pacheco- Ramírez es un vivo ejemplo de este hecho. Ella se convirtió en mamá a los 30. “Mi esposo y yo nos casamos en 2015 y quisimos esperar que él terminara su maestría y que estuviéramos un poco más establecidos”, contó.
Sin embargo, Catacora-Sullivan es una excepción a la norma. La joven, quien se casó a los 19 años, se convirtió en mamá por primera vez a los 21. Admite que se enamoró de su esposo y se casó rápido. “Él y yo somos militares. Nos conocimos cuando yo estaba entrenando para la fuerza aérea. Nos hicimos novios y a los tres meses nos casamos”, contó. La pareja esperó dos años para tener un bebé. “Mi hijo mayor tiene un año y cinco meses. Su hermanito nacerá cuando tenga año y medio”, manifestó.
Orgullosas del rol de mamá
Paula y su esposo Samuel Ramírez, con el pequeño Joshua. Esperan su segundo bebé.
Otra de las características de las madres del milenio es que consideran que están haciendo un buen trabajo de maternidad. El informe de Pew, dice que el 57% de madres milenarias están contentas con el papel de mamás que desarrollan en comparación del 48% de las madres de la Generación X y 41% de las Baby Boomers (Nacidos entre 1946 y 1964).
Las millennials se informan más, son cuidadosas con la alimentación y prefieren la comida orgánica. Se concentran en el desarrollo físico y emocional de sus niños.
“Desde que estaba planeando quedar embarazada me informé sobre qué hacer para que mi bebé nazca saludable, intenté cortar químicos en los productos de limpieza y personal”, dijo Pacheco-Ramírez.
Pacheco, quien tiene un diploma asociado en Psicología, invierte horas informándose sobre la crianza y desarrollo de su niño y futuro bebé.
Ambas madres, Catacora-Sullivan y Pacheco-Ramírez decidieron, junto a sus esposos, quedarse en casa para criar a sus niños.
Madres digitales
Las mamás del milenio están extremadamente conectadas al Internet y lo usan para pedir consejos y obtener información. “Se ha creado nuevas tribus virtuales, en donde nos apoyamos a la distancia para la crianza de nuestros hijos”, publica el blog www.unamamamillenial.com.
Tanto Pachecho-Ramírez, como Catacora-Sullivan leen blogs y sitios de Internet dirigidos a madres y comparten información que enriquece la educación y desarrollo de sus niños.
De acuerdo a KRC Research, los jóvenes padres están activos en al menos tres sitios de redes sociales, como Twitter, Facebook, Snapchat, Instagram, Youtube y Pinterest, sin mencionar los grupos pequeños y cerrados.
Lo sorprendente del estudio es que en promedio las madres del milenio invierten alrededor de 17 horas por semana en las redes sociales.
Calidad y seguridad
Las madres del milenio toman en serio la seguridad y valor de los productos, desde las compras de mercado, comida y ropa hasta accesorios y pañales. De acuerdo a Adweek, el 80% de madres milenarias están más preocupadas en la calidad y seguridad de los productos que en los precios. Son compradoras inteligentes buscan recomendaciones de productos antes de consumirlos y evalúan los que ya han usado.
Comprar los pañales correctos se convierte en una tarea profunda de investigación.
“Nosotros hemos probado cinco tipos de pañales hasta dar con el más adecuado para Joshua”, manifestó Pacheco-Ramírez. “Buscamos productos que no tengan fragancia y alimentos orgánicos”, añadió.
Según la página babygaga.com el 90% de las madres milenarias escriben algo sobre el producto que han comprado en las redes sociales y 74% pide alguna recomendación antes de adquirir un producto.
Fotografías cuentan la historia
Las madres del milenio plasman sus logros, avances y alegrías de sus hijos y familia a través de fotografías de alta calidad y artísticas.
“Valoro los momentos con mi esposo e hijo y quiero dejarlos en la memoria”, expresó Catacora-Sullivan, quien recién publicó las imágenes de una sesión de fotos con su esposo, Brando e hijito William.
