Toda clasificación genera dudas sensatas. Cuando un panel de expertos se reúne para dar a sus favoritos en cualquier materia, el debate y las polémicas saltan a la mesa. Así sucedió recientemente en la NBA luego de que el portal especializado, Bleacher Report, revelara su lista con la que, a juicio de quienes conforman la marca, están los mejores 50 jugadores que alguna vez se hayan desempeñado en el tabloncillo.
En una liga de tan enorme nivel y con generaciones diferentes pero exitosas, presentar a solo 50 elementos causa ruido, mucho ruido, pero si el conteo también pondera los nombres y no se rige bajo un esquema aleatorio, este se potencia con cada escalón.
Una vez presentado al público el subjetivo artículo, propios y extraños se vieron sorprendidos ante lo que fue un sistema que no sorprendió en su primer puesto, pero que sí se vio criticado por lo que reveló desde el segundo lugar en adelante.
Pese a que la subjetividad está presente en la opinión de los especialistas, fueron más los lamentos que los aplausos que envolvieron a la afamada clasificación.
El lamento de Kobe
Kobe Braynt ya no es un jugador activo en la liga, pero su influencia en la NBA sigue más vigente que nunca. Alguna vez el referente de su generación, el escolta, estrella de los Lakers de Los Ángeles, no solo es recordado por su talento en la duela, también porque su manera de manejar la presión lo catapultó al punto de ser actualmente un mentor de las nuevas figuras del campeonato.
No en vano estuvo detrás del éxito del griego Giannis Antetokounmpo, MVP de la 2018-2019, a quien retó para hacerse con el galardón hace dos campañas.
Pero para Bleacher Report, un hombre de sus características, ganador por naturaleza, el podio no es merecido. En el lugar 14, Bryant, para muchos el puente entre el mítico Michael Jordan, primero en el conteo, y LeBron James, segundo en la lista, se vio alejado del lugar que realmente merece en la historia de la NBA.
Mejor tirador
Cada vez que Stephen Curry tiene el balón, se le debe marcar de la mejor forma posible. El base de los Warriors de Golden State, aún activo y con mucho camino por recorrer, es el mejor tirador que ha pasado por la liga. Sí, dentro de un sistema con tan prolíficos anotadores, el puesto uno de los de Oakland se erige como el tipo que mejor sabe mandar el balón al aro.
Sus tiros son circenses si está bajo la fuerte marca de sus rivales, mientras, si se encuentra solo, es un caso perdido para sus contrincantes.
Camino a convertirse en el máximo triplero en la historia de la NBA y altísimas opciones de dejar una fuerte huella que posiblemente jamás será superada, el piloto se asoma como el décimo mejor jugador en la historia de la NBA, tal vez algo precipitado para alguien que, si bien conformó uno de los mejores grupos en titularse, aún debe demostrar mucho más.
¿La mejor etapa?
De los 50 mejores jugadores de la historia que presentó Bleacher Report, ocho de ellos aún están disponibles para jugar, mientras que otros ocho se retiraron hace no más de cinco años, habiendo coincidido todos en algún punto de sus carreras.
Visto de esa forma, con 16 elementos compartiendo, algunos en el mismo equipo y otros rivalizando jornada a jornada, vale la pena preguntarse si esta generación de atletas es la mejor de todos los tiempos.
Nuevamente la afirmación: es un tema subjetivo; no obstante, la mutación que ha sufrido el baloncesto en los últimos años, con un juego mucho más veloz y donde el roce perdió un poco de peso para brindarle la oportunidad al tiro de media y larga distancia, obligó a poner sobre la mesa y ponderar a la pieza con la mejor condición atlética posible.
Se habla español
Dos jugadores de habla hispana dicen presente en el top 50 de la marca: Pau Gasol y Manu Ginóbili.
El español, camino a su temporada número 19 y con par de títulos en su haber, aparece en la casilla 46. Actualmente con el uniforme de los Bucks de Milwaukee las opciones de sumar un tercer anillo son enormes, lo que agrandaría aún más su leyenda, siendo uno de los principales puentes entre su país y la NBA.
Por su parte, el argentino, ya retirado, es una leyenda viviente en San Antonio, donde fue figura de los Spurs por 16 años y ganó cuatro títulos. Su labor fue tal que su camiseta fue retirada y su apellido luce en lo más alto del AT&T Center.