Tras una votación celebrada en la plenaria de la Asamblea General de Naciones Unidas en la cual participaron 193 países, se escogió a Brasil y Venezuela para ocupar los dos puestos de América Latina y el Caribe para el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Brasil logró 153 votos, mientras que Venezuela 105 votos. El otro país participante fue Costa Rica que consiguió acumular 96 votos.
La elección se realizó en medio de una gran controversia por las denuncias de violación de derechos humanos por parte del régimen de Nicolás Maduro, descritos en el informe presentado por la alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, y que documenta unos 6 mil asesinatos cometidos supuestamente por fuerzas de seguridad gobierno venezolano desde enero de 2018.
Además del Grupo de Lima, Estados Unidos realizó esfuerzos para evitar que Venezuela llegara a ocupar un puesto en el Comité de Derechos Humanos. A última hora se postuló Costa Rica, pero no obtuvo los votos suficientes para dejar por fuera a la representación de Nicolás Maduro en esa instancia de la ONU.
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De acuerdo con las normas de la ONU, los miembros elegidos, Brasil y Venezuela, ocuparán los escaños por un período de tres años y no pueden ser reelegidos cuando culminen su periodo de manera inmediata.
Los protocolos de la organización establecen que las membresías del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas están abiertas a todos los países que conforman la ONU. Las elecciones se realizan de mediante la votación individual y directa de los representantes por mayoría absoluta de 97 votos. El sistema de votación es secreto, por papeletas y se realiza todos los años.
Venezuela y Brasil iniciarán su ciclo de membresía en el Consejo de Derechos Humanos el 1 de enero.
