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Las lecciones de los entrenamientos primaverales de la MLB

La temporada 2020 de la Major League Baseball (MLB) iniciará más tarde de lo esperado. Es un hecho que se confirmó durante la jornada del 12 de marzo por parte del propio sistema de Grandes Ligas, el cual, a través de un comunicado, acusó al brote del coronavirus Covid-19, catalogado como una pandemia por parte de la Organización Mundial de la Salud, y que obliga a resguardar a sus joyas y también a los fanáticos que día a día siguen la disciplina; no obstante, la decisión llegó en medio de los entrenamientos primaverales. Algunos equipos se acercaron a la cifra de los 20 encuentros de pretemporada, dejando una suerte de abrebocas de lo que sería esa zafra 2020, la cual se espera que inicie sobre el mes de mayo, aunque hay aires de optimismo en el deporte norteamericano para ver acción antes mientras especialistas buscan la solución a la lamentable situación que se convirtió en un peligro para toda la humanidad.

Sorpresas y decepciones

En esta corta etapa que antecede al inicio de la temporada, varios equipos dieron la sorpresa, muchos de ellos en el mejor plan posible mostrándose como grupos que podían ser esa revelación durante la ronda regular.

Marlins de Miami y Azulejos de Toronto mostraron un récord positivo de 12 de victorias y seis derrotas en la Liga de la Toronja, una comandada por los Filis de Filadelfia. Mientras tanto, en la Liga del Cactus fueron los Atléticos de Oakland y los Oadres de San Diego los que dejaron mejor a foja hasta el momento.

Pero hubo otros que no dieron la talla y que encendieron las alarmas pese a que no necesariamente lo que sucede en los entrenamientos se tiene que cumplir durante el curso.

El primer caso tiene que ver con los Astros de Houston. El equipo sideral ha estado en la palestra pero lamentablemente por noticias negativas. El combinado tejano estuvo en el tapete por haberse conocido que implementó un sistema para robar señas a sus contrincantes en la temporada 2017, precisamente la campaña en la que se coronaron campeones de la Serie Mundial.

La problemática se extendió al punto de acusar a varias de sus piezas no solamente de haber sido parte de este sistema, también de haber contado con asesorías individuales para conocer un poco mejor los picheos de sus rivales.

Cuando subió el telón de los entrenamientos y los encuentros entre equipos iniciaron, también comenzó una campaña de odio y agresividad contra la toletería de los Astros. Los gritos y pancartas reprochando la acción de sus figuras no se hicieron esperar; todo lo contrario, la promesa por parte de varios seguidores se cumplió cuando empezaron los compromisos de pretemporada.

El impacto anímico tuvo efecto inmediato al menos en esa corta etapa de la campaña. Con 18 compromisos, Houston dejó marca de siete triunfos y 11 caídas, pero eso no fue lo más alarmante, el rendimiento de sus principales piezas dejó mucho que desear. Por ejemplo, George Springer apenas bateó para .261 puntos de average; sin embargo, fue el mejor entre los toleteros más llamativos de la franquicia, pues Alex Bregman mostró un promedio de .200 unidades. Ni hablar del caso del venezolano José Altuve, Jugador Más Valioso de la Liga Americana en la campaña 2017 y quien, al conocerse el hecho, dijo estar libre de todo pecado; no obstante, no fueron pocos los fanáticos que pidieron a la MLB retirar el galardón al latino. En ocho encuentros disputados para el caribeño, bateó solamente para .150 de average.

Un nuevo comienzo

Félix Hernández transita por su versión más terrenal. El lanzador venezolano pactó con los Bravos de Atlanta un acuerdo de liga menor que, dependiendo de cómo hubiese sido su accionar durante los entrenamientos, le permitía contar con una posibilidad de estar con el equipo grande. Aunque el parón deja más preguntas que respuestas en el entorno de los equipos de las Grandes Ligas, para el latino esta corta etapa se tradujo en una actuación lo suficientemente positiva como para pensar en contar con altas posibilidades de ser el quinto hombre en la rotación del equipo de Georgia.

Luego de cuatro compromisos, todos ellos en condición de abridor, Hernández dejó marca de una victoria y una derrota, efectividad de 1.98 en 13.2 innings de labor. En ese lapso, el derecho otorgó cinco boletos y abanicó a 14 rivales.

Los seguidores de las Grandes Ligas y el propio venezolano saben que atrás quedó aquella versión exitosa del dos veces ganador del premio Cy Young en la Liga Americana, alguien que fue considerado eventualmente el mejor diestro en todas las Grandes Ligas, un hombre con una recta de alta velocidad pero también con un repertorio en donde el comando de sus lanzamientos estaban a la orden del día.

El dominio de Félix era increíble; sin embargo el tiempo pasó y con él las opciones de sumar más galardones a su palmarés. Pero el tiempo le dio otra oportunidad que supo aprovechar.