
El presidente electo de México, Enrique Peña Nieto.
México – El Gobierno de México busca concretar en las siguientes semanas la compra de un avión presidencial con la más alta tecnología y medidas de seguridad, una decisión que es rechazada por la izquierda debido por su “exorbitante” coste.
Las negociaciones comenzaron a principios de este mes entre el fabricante estadounidense Boeing y las autoridades mexicanas, a través del ministerio de la Defensa y Hacienda, para llegar a un acuerdo comercial, dijeron el viernes 19 de octubre fuentes cercanas al proceso.
La intención es renovar la flota presidencial con aviones de última tecnología, que además de ser más favorables al medio ambiente permiten ahorro de combustible, explicaron a Efe fuentes gubernamentales.
Se trata de una aeronave tipo B-787-9 Dreamliner, de última generación, cuyo coste en el mercado oscila en torno a los 139 millones de dólares, aunque México busca que se adquiera por medio de arrendamiento en una operación a veinte años.
Este nuevo aparato sustituiría al avión presidencial TP-01, bautizado con el nombre de Benito Juárez (1806-1872), el primer indígena en llegar a la Presidencia de México.
“El “Benito Juárez” está cumpliendo 24 años de servicio, después de ser adquirido en 1988. Esta vieja aeronave la ha utilizado el presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, durante la gira por Europa que cerró ayer.
Fuentes de Boeing consultadas por Efe dijeron que las autoridades mexicanas se comenzaron a interesar en esa aeronave en marzo pasado, cuando el fabricante trajo a México un modelo parecido para ofrecérselo a la compañía local Aeroméxico.
La decisión de renovar la flota presidencial no ha sido bien recibida por la oposición de izquierdas.
El diputado Ricardo Monreal, del Movimiento Ciudadano, llevó hoy al Parlamento una moción en la que pide al Gobierno que desista de la compra ya que “resulta tan exorbitante el monto que se desea destinar”.
Monreal cree que ese dinero se podría destinar a atender retos sociales, como la generación de empleos y atención a personas mayores, entre otros.
“Representa la mitad del presupuesto destinado a algunas entidades federativas”, indicó el legislador en su moción, que tendrá que ser discutida por una comisión.
En su proyecto de resolución, al que tuvo acceso Efe, Monreal asegura que México gastaría más de lo calculado, ya que el precio de lista de la aeronave es de 190 millones de dólares, pero se añadirían otros 100 millones de dólares “en equipamiento interior y seguridad”.
“El costo total de la aeronave rondaría los 239 millones de dólares”, agregó.
La medida forma parte de un plan de la Fuerza Aérea Mexicana y del Estado Mayor presidencial para renovar la flota aérea, que tiene un cuarto de siglo de antigüedad.
Este plan fue propuesto durante la pasada legislatura (que se cerró en abril pasado) por un grupo de diputados a fin de garantizar la seguridad tanto del Ejecutivo federal como de los funcionarios públicos que lo acompañan en sus diversas giras de trabajo.
El ministerio mexicano de Hacienda divulgó en su momento los proyectos de petición de egresos, entre los que se encuentra la petición de la Defensa para la adquisición o arrendamiento de una nueva aeronave para uso del presidente de la República, sin fijar montos.