El D.C. United visitará al Chicago Fire el sábado en el Toyota Park de Chicago para disputar su último partido de la temporada regular, y en busca de un triunfo o un empate que lo ubique definitivamente en la segunda casilla de la Conferencia Este.
Luego de que el Sporting Kansas City se consagrara el miércoles en el primer lugar del grupo, los resultados de este fin de semana de los partidos entre el Fire y el D.C. United, Philadelphia vs. Nueva York y Columbus vs. Houston son los que terminarán de definir las posiciones en la tabla y la composición de los Playoffs.
Y será la combinación de esos resultados lo que establecerá los diferentes escenarios que mantienen a los dirigidos por Ben Olsen con la posibilidad de medirse bien sea a Chicago, Nueva York o Houston, en la primera o la segunda fase de la postemporada.
“Todavía hay un trabajo que hacer. Estoy muy orgulloso de los muchachos y mis asistentes. Ha sido un largo año en el que hemos pasado altas y bajas pero estar en los playoffs es un gran resultado para nosotros”, dijo Olsen sobre la posición de su club que lo único que tiene seguro hasta ahora es la clasificación, aunque necesita un buen resultado ante el Fire para estar en una situación más cómoda en la liguilla.
Las posibilidades del United son las siguientes: con un triunfo o empate ante el Chicago Fire, el United asegurará el segundo lugar de la Conferencia y el derecho a abrir el Playoffs fuera de casa el próximo fin de semana frente al equipo que finalice en tercer lugar, una posición que también estará en juego en la jornada final.
Si Chicago pierde con los capitalinos y los Red Bulls le ganan al Union en el PPL Park de Philadelphia, Nueva York terminará tercero y abrirá la primera vuelta de la Liguilla en el Red Bulls Arena frente al United.
Pero si Chicago empata y Nueva York gana, ambos clubes tendrán 57 puntos. No obstante, en el desempate Red Bulls se queda con el tercer lugar por la diferencia de goles e igual tendría que medirse al D.C. United.
Houston ocupa actualmente la quinta casilla, pero con una victoria ante Colorado Rapids y si también ganan DC y Philadelphia, el Dynamo podría colarse hasta el tercer lugar y jugar contra los capitalinos.
Pero el United podría inclusive caer a la tercera o cuarta casilla. Con una derrota en Chicago, el FIRE podría superar al DC y si los Red Bulls vencen a Philadelphia el desempate por goles podría dejar a Nueva York en la tercera casilla, puesto en que podría finalizar el DC si los neoyorquinos empatan o pierden.
Todas estas posibles combinaciones sencillamente obligan al United a buscar el triunfo en Chicago y evitar descender a la cuarta casilla que lo obligaría a jugar el miércoles 31 en el RFK contra el club que en definitiva concluya en el quinto lugar.
Esta última opción es la menos conveniente para el tetracampeón.
En caso de tener que jugar un partido único en el RFK para definir el rival del Sporting Kansas City, los capitalinos lo harían con apenas cuatro días de descanso de su último encuentro de la temporada regular ante Chicago el 27 y a tres días de un hipotético primer partido ante Kansas City. Prácticamente el único punto a su favor es que ese partido del miércoles 31 se jugaría en DC donde el club lleva 16 juegos sin perder.
Aunque el United jugó este 2012 su mejor temporada eliminatoria de los últimos años, el club ha pasado momentos de incertidumbre, sobretodo desde que su estrella y capitán Dwayne De Rosario se lesionó por el resto de la campaña.
“Creo que hemos crecido desde que Dwayne (De Rosario) se lesionó y no es algo negativo en contra de él, fue una sobrevivencia”, explica Olsen.
“Todos entienden que nosotros tenemos que ser un verdadero equipo y apoyarnos unos a otros. Jugadores como Lio (Pajoy), Branko (Boskovic), Hamdi (Salihi), Maicon (Santos) todos contribuyendo y eso nos ayudó a ganar. Ellos están muy emocionados, quieren más, creen que pueden hacer muchas cosas”, agregó el estratega que ganó como jugador dos de las cuatro copas MLS que el United ha llevado a sus vitrinas, una experiencia que espera que sus muchachos asimilen.
“En los playoffs, defensivamente hay que hacerse sentir, especialmente cuando se está jugando contra buenos atacantes. También tendremos que ser un poco más agresivos en casa y como visitantes y asegurarnos de no permitir goles”, anticipó Olsen.
Y si de experiencia se trata, Olsen tendrá en hombres como el brasileño Marcelo Saragosa y el colombiano Pajoy a dos fuertes colaboradores.
“La clave es saber que los playoffs son una final, tenemos que empezar desde el primer minuto y hasta el final unidos y con fuerza porque cambia todo. Muchos jugadores aquí nunca han jugado en esta instancia y es como una guerra”, dijo Saragosa.
Por su parte, Pajoy expresó que el de Chicago y los encuentros finales “serán partidos de mayor inteligencia en los que hay mucho contacto” y se juega al fútbol pero “hay que hacerlo con inteligencia para sacar los resultados”, opinó el delantero colombiano.
“Hay mucha felicidad, llegamos hasta aquí, tenemos que trabajar y corregir errores pero tenemos la ansiedad por lograr grandes cosas”, concluyó Pajoy.