El dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Gustavo Madero, dijo el miércoles 26 de junio que el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, es “lo contrario del rey Midas”, pues “no trae respuestas, no trae estrategia”, y rechazó una crisis al interior de su fuerza política.
De gira por el estado de Puebla, uno de los 14 donde dentro de diez días se celebrarán elecciones locales, Madero dijo que el mandatario está generando una “preocupación muy fuerte” en los casi siete meses que lleva en el poder.
Con Peña Nieto se instaló en el país “el miedo de la reinstauración de las viejas prácticas” corruptas, aseveró.
“Nosotros identificamos que después de la elección del 2 de julio del año pasado, donde ganó el Partido Revolucionario Institucional (PRI), la ciudadanía empezó a preguntarse si lo que quería era más PRI o menos PRI y creo que ya se respondió”, explicó.
Madero, uno de los firmantes del Pacto por México impulsado por Peña Nieto para impulsar reformas estructurales de gran calado que ya ha dado algunos frutos, consideró que el próximo 7 de julio “viene una ola fuerte de regreso para castigar al PRI”.
El PRI ganó las elecciones del 1 de julio de 2012 y recuperó la Presidencia mexicana de la mano de Peña Nieto, luego de dos mandatos consecutivos del conservador de PAN (2000-2012).
Es probable que los votantes aprovechen los próximos comicios para condenar las políticas públicas en economía, inseguridad, ante “el problema del crecimiento de los precios de los alimentos” y el del “uso de los recursos públicos para tratar de ganar” la elección, apuntó.
El presidente del PAN auguró que su partido ganará Baja California, un estado que ya gobierna, y va “a doblar o triplicar el número de capitales y vamos a crecer de manera importante el número de municipios”.
El político conservador también habló de su partido y restó importancia a la crisis evidenciada en las últimas semanas.
“Lo que estamos viviendo es un fortalecimiento muy vigoroso del PAN” y eso se verá “el próximo 8 de julio”, cuando haya resultados de los comicios, afirmó.
Madero solo ve “diferencias” entre distintos líderes como las que existen en “todos los partidos” y que “se procesan de manera institucional”.
Las desavenencias surgieron públicamente hace dos meses, cuando Madero se enfrentó con el senador y exministro Ernesto Cordero, cercano al expresidente Felipe Calderón, y le retiró de la coordinación del PAN en el Senado.
El líder se dijo convencido de que la formación política que encabeza saldrá fortalecida de los comicios del 7 de julio próximo y será “el único partido que va a crecer” en esa cita en las urnas.
Ese día serán elegidos 1.374 servidores públicos en catorce estados del país, entre ellos el nuevo gobernador de Baja California, en una jornada en la que están llamados a votar un tercio de los mexicanos.