CARACAS—Los motorizados, como se conoce en Venezuela a los motoristas, personas que trabajan o se desplazan en moto circulando entre automóviles, tocando bocinas y a menudo violando las reglas del tránsito, han vuelto a clase para tomar cursos de ética y mejorar así su comportamiento en las calles.
La iniciativa es liderada por el también motorizado Iván Navarro, que ha creado un “Código de Ética” para “cambiar la imagen” de sus colegas, temidos tanto por peatones como por automovilistas debido a su manejo imprudente que muchas veces incluye circular en sentido contrario al tránsito.
“Lo que busco es cambiar la imagen de los motorizados con disciplina y educación”, dijo Navarro. “Voy dando talleres de ética por todo el país y mi propuesta es crear una escuela de formación de motorizados, porque este problema no se puede corregir con multas, sino con educación, con la toma de conciencia por parte de los motorizados”, señaló.
Las motocicletas también son consideradas por muchos como la “peor pesadilla” de las calles venezolanas ya que los delincuentes las usan para cometer delitos y luego huir.
Navarro, de 49 años y 33 como motorizado, cita cifras que señalan que en al menos un 80 % de los delitos que ocurren en Venezuela, un país con la tasa de homicidios más alta de Sudamérica, se cometen a bordo de una moto.
Muchos delincuentes usan las motos para desplazarse y también asaltar a los automovilistas cuando están detenidos en los numerosos embotellamientos que se ven a diario en las principales ciudades del país. “Son la peor pesadilla, son realmente una desgracia porque se te tiran encima, porque asaltan y se creen dueños de la calle”, dijo María Núñez.