El psiquiatra del ejército en juicio por la masacre de 2009 en Fort Hood fue hallado culpable por el jurado el viernes 23.
El mayor Nidal Hasan se defendió a sí mismo, pero se negó a hacer su alegato después de que los fiscales terminaron el suyo, el día anterior. Cuando el juez le dijo a Hasan que podía comenzar, dijo: “La defensa decide no hacer un alegato final”.
El siquiatra del ejército enfrenta numerosos cargos de asesinato premeditado e intento de asesinato premeditado por el ataque, en el que murieron 13 personas y más de 30 resultaron heridas en una base militar de Texas el 5 de noviembre de 2009.
Fue el tiroteo con mayor saldo de muertos que haya ocurrido en una base militar estadounidense.
Los fiscales mostraron una detallada hoja de ruta de su caso durante su alegato final, en el que aseguraron que no había duda de que Hasan planeó y realizó el ataque.
“Los hechos que presenté a ustedes les dejan sólo una opción”, dijo el fiscal, el coronel Steve Henricks, a los miembros del jurado. “El acusado sin duda —sin ninguna duda en absoluto— tenía un plan premeditado para matar”.
Los jurados comenzaron a deliberar el caso antes de las 2 de la tarde del jueves.
Hasan dijo a los jurados durante un breve alegato inicial hace casi dos semanas que las pruebas demostrarían “claramente” que él era el atacante, y se describió como un soldado que había “cambiado de bando”.
Desde entonces, ha permanecido en silencio sobre su silla de ruedas. Hasan, que quedó paralítico tras ser baleado por oficiales que respondieron al ataque, ha planteado pocas objeciones durante el juicio de 13 días.
El jueves, los fiscales militares pidieron a los miembros del jurado una condena unánime por los cargos de asesinato premeditado, lo que les permitiría solicitar la pena de muerte.
