“No es una historia de amor, no es una historia romántica. ¿Qué es, entonces?…” -Belisario.
El qué dirán, los prejuicios sociales, la soltería, la infidelidad, el abuso, el dolor por un gran engaño y el gran valor de ser fiel a su orgullo lleva a una mujer decepcionada a seguir sola hasta el final de sus días en la dura etapa de la vejez.
Esas características son las que muestra la obra teatral “La Señorita de Tacna” que se presenta en el Teatro Hispano GALA en Washington DC y que convierten al personaje en la “tía” querida, como muchos dirían de cariño.
La obra, del Premio Nóbel de Literatura, Mario Vargas Llosa, lleva al público del pasado al presente a través de la imaginación del escritor, Belisario, quien procura recrear el gran romance de Mamaé, una centenaria tía solterona, quien en sus días de juventud terminó abruptamente su noviazgo con un deslumbrante capitán chileno.
“La Señorita de Tacna” es un retrato jovial y conmovedor de una familia y sus secretos en el cual las memorias y el presente están entrelazados.
La obra muy bien puesta en escena con sobriedad, envuelve desde un principio a los espectadores. La audiencia puede identificar muy bien a los personajes dentro de la vida actual.
La particularidad de los acentos en los actores de diferentes países hace que no importe la nacionalidad para encontrar a “La señorita de Tacna” en cualquier parte del mundo. Ese toque cosmopolita que el arte regala a través de los actores en Washington, y bajo la fina y notable dirección de José Carrasquillo. El fundador de GALA, Hugo Medrano, hace el papel de “Abuelo”.
Los engaños llevan a varias mujeres a convertirse en “La Señorita de Tacna”, en el personaje de Mamaé. Los tiempos han pasado y lo que nunca va a cambiar son las decepciones amorosas, la doble moral de tener un o una “amante” que llevan a romper la relaciones en algunos casos.
Los engaños llevan a varias mujeres a convertirse en “La Señorita de Tacna”, en el personaje de Mamaé?, los tiempos han pasado y lo que nunca va a cambiar son las decepciones amorosas, la doble moral de tener un o una “amante” que llevan a quebrar la relaciones en algunos casos. Matrimonios por conveníencia, me caso con el o ella por su status porque es abogada, porque me conviene porque tendré papeles, el amor se vuelve un negocio.
En el fondo, ninguna mujer desea llegar a la vejez sola como Mamaé.
El hecho es que hoy en día millones de mujeres deciden estar solteras por decisión propia, trabajan por su independencia económica, porque se encuentran sanando heridas, fueron víctimas de engaño y están en un proceso de volver a creer en el amor.
La realidad que nos deja ver esta obra es que los miembros solteros de una familia se preocupan mucho más por mantener los lazos familiares entre hermanos, primos y padres, que las propias parejas.
¿Solterona? No. Mujer independiente y trabajadora que en el momento que ella decida abrirá nuevamente su corazón. ¡Feliz día de San Valentín a todas las solteras y solteros en el Distrito de Columbia y vayan al teatro Gala a conocer a “La señorita de Tacna “.
La obra permanece hasta el 9 de marzo en el GALA, 3333 14th St. DC. Boletos: 202-234-7174.