San Salvador—El presidente electo y excomandante guerrillero Salvador Sánchez Cerén afirmó que su victoria en los comicios del 9 de marzo es un reconocimiento de que las “luchas” armadas “fueron importantes” no sólo en El Salvador, sino en Latinoamérica, porque fortalecieron la democracia.
Sánchez Cerén, que también es el actual vicepresidente salvadoreño, se ha convertido en el primer excombatiente de este país centroamericano en conquistar a través del voto la Presidencia, que asumirá el 1 de junio próximo para el período 2014-2019.
“No soy el primero en América Latina. El presidente (uruguayo, José) Mujica, fue combatiente guerrillero, la presidenta de Brasil (Dilma Rousseff) también, el presidente Daniel Ortega (de Nicaragua) también”, dijo Sánchez Cerén en conferencia de prensa el lunes 17 ante una pregunta sobre su condición de exguerrillero que llega a la Presidencia. “Estamos en un proceso de que la historia que hemos venido construyendo ha ido reconociendo que las luchas fueron importantes (en Latinoamérica) y la lucha de El Salvador (1980-1992) fue importante porque inició un proceso de transición, que por 22 años ahora nos ha llevado construir una sólida democracia”, agregó.
Destacó que “es importante para El Salvador demostrar que es un país que está en proceso de reconciliación; pero no sólo eso, un país que ha fortalecido sus valores democráticos” tras el fin del conflicto armado.
Sánchez Cerén reafirmó que su Gobierno será “abierto al mundo”. Estados Unidos y El Salvador tienen relaciones bilaterales “desde hace mucho tiempo”, pero “eso no niega” que El Salvador “es un país soberano”, indicó.