La Oficina del Alcalde en Asuntos Latinos (OLA, por sus siglas en inglés) reconoció los esfuerzos de distintos grupos para aumentar la conciencia con respecto a la importancia de la vacunación.
La falta de prevención representa una pérdida de “días de trabajo” debido a la influenza, dijo a El Tiempo Latino la directora de OLA, Roxana Olivas.
Los socios de campaña de la La Asociación Nacional contra las Desigualdades en la Vacunación contra la Influenza (NIVDP, por sus siglas en inglés) ayudaron a vacunar a más de 10.000 personas en las poblaciones carentes de servicios médicos en el área metropolitana de Washington DC, durante las temporadas de influenza 2013-2014.
En la actividad realizada el jueves 11 de junio participaron el popular locutor Pedro Biaggi, de radio El Zol 107.9; Dara Koppelman, jefa de Enfermería del centro infantil Mary’s Center, y Roxana Olivas, directora de OLA.
En Estados Unidos cada año entre 5 y 20 por ciento de la población se infecta con el virus de la influenza, y más de 200 mil son hospitalizados durante la temporada más fuerte de la enfermedad, de acuerdo con datos proporcionados por OLA.
Mario Franco, del Consejo Nacional Hispano para Adultos Mayores (NHCOA, por sus siglas en inglés), afirmó que por su parte que “las personas de la tercera edad son más propensa” a contraer la gripe debido a que tienen un sistema inumunológico más vulnerable.
Por otro lado, la inmunidad es importante para proteger a los niños de enfermedades que se pueden prevenir con vacunas, tales como la tosferina (o pertussis), y la varicela, las cuales todavía se encuentran vigentes en los Estados Unidos. Si las personas dejaran de vacunarse, incluso los pocos casos de enfermedades poco comunes en los Estados Unidos, como el sarampión, podrían convertirse rápidamente en decenas o cientos de miles de casos, de acuerdo con los Centros para el Control de Enfermedades (CDC).
Cada temporada de influenza es diferente y la infección por el virus de la influenza puede afectar a las personas de diferentes maneras. Incluso las personas sanas pueden enfermarse gravemente a causa de la influenza y contagiar a otros el virus.
En un período de 31 temporadas entre 1976 y 2007, los cálculos aproximados de muertes asociadas a la influenza en Estados Unidos variaron desde un mínimo aproximado de 3.000 personas a un máximo aproximado de 49.000. Durante una temporada de influenza normal, aproximadamente el 90 por ciento de las muertes se produce en personas de 65 en adelante, de acuerdo con los CDC.