El senador republicano de Texas, Ted Cruz, de origen cubano, lanzó su candidatura por la presidencia de EE.UU., entre críticas de sectores progresistas que lo cuestionan por sus posiciones “antiinmigrantes”.
“Es un honor situarme con todos ustedes, conservadores valientes, para reclamar la promesa de Estados Unidos”, dijo Cruz el lunes 23 de marzo en la institución evangelista Liberty University (Lynchburg, Virginia), cuyo lema es “Formando a los defensores de Cristo”.
Cruz es el primer político que anuncia oficialmente su intención de presentarse a las elecciones de 2016, de las que surgirá el sucesor del demócrata Barack Obama en la Casa Blanca.
Sin embargo, activistas proinmigrantes criticaron a Cruz por oponerse a los programas de alivio migratorio conocidos por sus siglas en inglés como DACA y DAPA anunciados por el presidente Obama, que no se han instrumentado debido a que las cortes analizan su constitucionalidad tras la demanda de estados opositores a esas medidas.
“La única política que conocen los latinos de Ted Cruz es que quiere terminar DACA para los dreamers, bloquear DAPA para nuestros padres y obstruir por años la reforma migratoria”, indicaron en un comunicado César Vargas y Érika Andiola, codirectores de la organización Dream Action Coalition.
“Rechazamos a Ted Cruz, lo cual es triste, porque aunque es el primer latino en declarar su candidatura, quizás se convierta en el candidato más antiinmigrante durante los debates”, indicaron.
El director de CASA in Action en Virginia, Lindolfo Carballo, rechazó la presencia de Cruz en Virginia, al indicar que “recibir a candidatos antilatinos y antiinmigrantes como Ted Cruz” puede perjudicar el acercamiento que buscan los republicanos hacia los electores hispanos.
El aspirante republicano ha divulgado un video en español en las redes sociales en las que destaca sus raíces inmigrantes cubanas y su trayectoria.
El senador texano se presentó ante los estudiantes en Virginia como el verdadero candidato conservador y quien desea “restablecer la promesa (del sueño) de Estados Unidos” y la “idea revolucionaria de que nuestros derechos vienen de Dios, el Todopoderoso”.
El republicano propuso derogar toda la ley de sanidad aprobada por Obama en 2010 y acabar con el sistema de recaudación de impuestos (IRS, por sus siglas en inglés) para establecer una tasa impositiva única.
También prometió modificar el sistema migratorio para reforzar las fronteras y conseguir un “sistema” que beneficie a “aquellos que vienen en busca del sueño estadounidense”.
“Con la gracia de Dios y su bendición providencial hemos superado grandes desafíos. Comparado con ello, derogar Obamacare (como se refieren los republicanos a la reforma sanitaria) y abolir el IRS no será tan complicado”, señaló.
El senador, que estudió en Harvard y Princeton, se presentó como el candidato que luchará contra el elitismo de Washington y la injerencia excesiva del Gobierno en la vida de los estadounidenses.
Cruz mencionó en su anuncio de candidatura que su padre abandonó Cuba en los últimos coletazos de la dictadura de Fulgencio Batista en 1957 para casarse con una estadounidense, Eleanor Darragh.
El republicano, una de las figuras en alza del movimiento ultraconservador del Tea Party, no olvidó mencionar que nació en Calgary (Canadá), por lo que ha tenido que renunciar a la posibilidad de obtener nacionalidad canadiense para no verse inhabilitado para ser presidente.
Con información de EFE.
