Una de cada cuatro mujeres ha sufrido cistitis en el último año, según datos del Centro de Información de la Cistitis. Se trata de una infección urinaria que afecta a la vejiga.
De hecho, los especialistas de la Clínica Universidad de Navarra (norte de España) indican que la infección urinaria es la enfermedad más habitual del aparato urinario y también de todo el organismo, solo por detrás de las respiratorias.
“Las mujeres son quienes con más frecuencia padecen infecciones de orina. Esto ocurre porque la uretra de la mujer es muy corta, mide unos tres centímetros y, por tanto, es fácilmente accesible para las bacterias”, explica Cristina De Castro, miembro del Servicio de Urología del Hospital La Paz de Madrid.
De Castro aclara que la causa más frecuente de cistitis se debe al ascenso directo de bacterias a través de la uretra. Estas bacterias están en la zona del margen uretral, en la zona vaginal e incluso en el margen perianal y, mediante la uretra, llegan hasta la vejiga.
Bacterias, hongos o virus
Los especialistas de la Clínica Universidad de Navarra detallan que los gérmenes causantes de cistitis habitualmente son bacterias pero, de manera excepcional, esta enfermedad también puede deberse a hongos o virus.
Asimismo, la doctora De Castro precisa que, entre las infecciones de orina de origen bacteriano, la causa más habitual es la “Escherichia coli”. No obstante, hay otras bacterias, como la “Klebsiella pneumoniae”, que es la que aparece en segundo lugar. “Además, en pacientes inmunodeprimidos vemos bacterias oportunistas que también producen infecciones en la orina”, destaca.
La uróloga afirma que en la aparición de cistitis hay varios factores implicados. Así, explica que suele estar asociada a momentos en los que existen bajadas de defensas, como sucede, por ejemplo, cuando se tiene un catarro.
“También puede ocurrir en momentos en los que hay cambios hormonales como en el periodo premenstrual o en las mujeres premenopáusicas”, subraya.
“Puede sobrevenir, además, en momentos en los que se producen movimientos de bacterias, como después del coito, cuando la aparición de infecciones es muy frecuente”, dijo.
“También vemos infecciones de orina en sectores poblacionales muy determinados, como los pacientes diabéticos, por la propia alteración inmunológica que supone la diabetes; o en pacientes con alteración de sus defensas motivada por otras causas”, expresa.
Del mismo modo, el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS por sus siglas en inglés) afirma que casi todas las mujeres tendrán cistitis al menos una vez en la vida.
Además, “entre aquellas que ayan padecido la enfermedad, una de cada cinco la presentará de nuevo, lo que se conoce como cistitis recurrente”.
Afecta en cualquier edad
Los especialistas del NHS subrayan que la cistitis puede aparecer a cualquier edad, aunque es más común en embarazadas, en mujeres sexualmente activas y entre quienes se hallan en la menopausia.
Entre los síntomas de la cistitis, destacan las molestias a la hora de orinar. “Hay escozor al orinar (lo que llamamos disuria); aumento de la frecuencia miccional (polaquiuria) que se asocia, además, a la emisión de muy pocas gotas de orina.
También puede aparecer sangrado en la orina y, a veces, hay molestias en la parte baja del abdomen”, comenta la doctora De Castro.
Ante estos síntomas, es necesario acudir al médico de atención primaria o al urólogo. “Si concuerdan los síntomas y el médico tiene claro que es una cistitis, recogerá un cultivo de orina para tener una muestra que confirme que efectivamente hay una bacteria y, a continuación, prescribirá un tratamiento antibiótico.
Una vez finalizado dicho tratamiento, se debe realizar otro cultivo para asegurarse de que la orina queda estéril”, subraya.
Por su parte, el Centro de Información de la Cistitis afirma que “cuatro de cada cinco infecciones focalizadas en las vías urinarias están provocadas por la “Escherichia coli”, una bacteria que en los últimos años se ha hecho resistente al tratamiento con antibióticos, lo que genera algunas cepas bacterianas más virulentas que las primigenias”.
Recomendaciones
Como medida preventiva, los expertos en urología aconsejan tomar arándano rojo. Estos frutos “tienen poder antiséptico y se recomiendan como una medida de profilaxis para quienes tienen infecciones de orina de repetición”, apunta De Castro, quien también recomienda “vaciar la vejiga con asiduidad, es decir, orinar cada dos o tres horas”.
Además, afirma que hay que beber aproximadamente dos litros de agua y líquidos al día, una cantidad que puede variar en función del deporte que se haga o de las pérdidas que se tengan. Otro de sus consejos es evitar el estreñimiento, “pues hemos visto que también está relacionado con el aumento de las infecciones de orina”, dice.
A las mujeres sexualmente activas, la especialista les recomienda “orinar antes y después de la relación sexual para que el propio mecanismo de la micción arrastre las bacterias que puedan haberse extendido a través de la uretra”.
Durante el verano, cuando los baños en playas y piscinas son muy frecuentes, es conveniente no tener puesto el traje de baño mojado durante mucho tiempo. La uróloga explica que, aunque no hay una causa directa entre la humedad en la zona vaginal y la infección de orina, sí puede
aparecer una reacción local inflamatoria o de irritación que favorezca la infección.