Al menos tres pistoleros abrieron fuego en un centro de convenciones durante una fiesta para los empleados del condado en San Bernardino, California, ciudad situada a una hora en auto de Los Angeles. En este momento hay 14 personas muertas y 17 heridas. La policía buscó a una furgoneta SUV que fue vista abandonando la escena del tiroteo la tarde del miércoles 2 de diciembre. Posteriormente la policía y los sospechosos se enfrentaron a tiros. Murieron dos. Ambos, un hombre y una mujer, se encontraban fuertemente armados. Un tercer sospechoso se encuentra detenido.
Una fuente oficial ha identificado a uno de los sospechosos de los asesinatos de San Bernardino como Syed Farook, quien vivía en una casa que la policía registró después del tiroteo. Ese nombre ha estado circulando por las redes sociales y otros medios de comunicación durante las primeras horas de la noche del miércoles.
Una persona con el nombre de Syed Farook figura como empleado del departamento de Salud Pública del Condado de San Bernardino. Trabaja como inspector de salud. Este es el departamento que organizó la fiesta en el Inland Regional center.
El alcalde de San Bernardino, R. Carey Davis, dijo en un comunicado que su comunidad se encontraba bajo un severo shock y una enorme sensación de pérdida. Los asesinatos en el Inland Regional Center “han golpeado el corazón de nuestra comunidad”.
“Es crítico que en momentos como estos, nuestra ciudad se una para apoyar a las víctimas, a las familias y en el esfuerzo común contra el crimen en nuestra ciudad”, expresó el alcalde Davis. “Seguiremos utilizando todos nuestros recursos de seguridad disponibles para la comunidad de San Bernardino en el proceso de asimilar esta tragedia”.
El presidente Barack Obama habló en el canal de TV CBS: “Ahora sabemos que existe un patrón de tiroteos y masacres en este país que no tiene paralelo en ninguna parte del mundo. Y hay medidas que podríamos tomar no para erradicar por completo este tipo de tiroteos, pero para mejorar las probabilidades de que no sucedan tan frecuentemente: leyes de armas con sentido común, chequeos más estrictos para quien compre armas… y para quienes estén preocupados por el terrorismo…. algunos conocen el hecho de que existen listas que impiden a ciertas personas subirse a un avión, pero esas mismas personas que no pueden volar pueden ir a una tienda en este momento en Estados Unidos y comprar una arma de fuego y no hay nada que podamos hacer para impedírselo…
“Ese es el tipo de leyes que necesitan cambiar… Todavía no sabemos los motivos de estos pistoleros, pero lo que sí sabemos es que existen medidas que podemos timar para hacer que los estadounidenses vivan más seguros y que debemos unirnos de manera bipartidista a todos los niveles del gobierno para hacer de estas tragedias la excepción, no la norma. Nunca debemos pensar que esto es algo que ocurre como algo normal, porque no ocurre con la misma frecuencia en otros países”.
