El hombre inteligente debería considerar que la salud es la mayor de las bendiciones humanas. Que la comida sea tu medicina. Hipócrates
El chocolate forma parte de nuestras vidas. Representa emociones que hemos vivido, nos recuerda momentos románticos, momentos de alegría o incluso de tristeza, y siempre es un buen compañero. Está con nosotros desde hace mucho tiempo hoy veremos cómo es la mejor manera de consumirlo.
¿Qué es realmente el chocolate?
Es el producto final que resulta después de tostar y procesar las habas obtenidas del árbol del cacao, y luego mezclar la pasta y manteca de cacao. El cacao de por sí tiene un sabor amargo pero sus propiedades y la sensación que deja después de comerlo o beberlo son maravillosas. En la época de los Mayas se le consideraba un regalo de los dioses que otorgaba cualidades divinas. Incluso se utilizaba como moneda de pago ya que formaba parte del tributo que los Mayas hacían a su Dios.
El chocolate es a menudo demonizado debido al alto contenido de azúcar y grasas contenidas en las barritas de chocolate, cremas o bollería y su asociación con un “placer culpable”. Sin embargo, el cacao o chocolate en su forma cruda contiene una gran cantidad de compuestos que benefician nuestro organismo.
Beneficios de consumir chocolate
-El chocolate tiene un perfil nutricional interesante, con cantidades razonables de manganeso, cobre, magnesio, hierro y hasta fibra. Contiene también una buena mezcla de grasas monoinsaturadas y saturadas.
-Su aporte de cafeína y teobromina le confiere propiedades estimulantes, aunque en mucha menor medida que el café.
-Tiene un gran poder antioxidante, superior al de la mayoría de frutas.
-Parece reducir el riesgo de enfermedad coronaria, probablemente a través de una reducción de la presión arterial, mayor producción de óxido nítrico y una mejora del perfil lipídico.
-Reduce la resistencia a la insulina, que además de contribuir a la enfermedad cardiovascular es uno de los motivos por el que a muchos les cuesta perder grasa.
-Ofrece protección frente a la exposición prolongada al sol.
-Mejora la capacidad cognitiva, a través de una mejor oxigenación del cerebro.
-Mejora de la sensibilidad a la insulina por su efecto estimulante.
Cómo seleccionar chocolate de verdad
Muchas tabletas convencionales que se encuentran en el supermercado no tienen más de un 30 ó 35 por ciento de cacao. Podrían describirse realmente como azúcar con sabor a chocolate. Incluso cuando algunas marcas hablan de chocolate oscuro se refieren a niveles del 50 por ciento, lo cual sigue siendo una golosina más que un alimento, invalidando buena parte de los beneficios que acabamos de revisar considera las siguientes recomendaciones para elegir un buen chocolate:
-El primer criterio es que contenga al menos un 70 por ciento de chocolate, pero idealmente 85 por ciento o más. Si te estás iniciando con el chocolate de calidad, empieza con 70 por ciento, y sube a medida que tu paladar acepta sabores más intensos.
-En segundo lugar, mira los ingredientes. El primer ingrediente debería ser cacao. Si aparece otro ingrediente en primer lugar, seguramente no debas comerlo. Encontrarás también manteca de cacao que es la grasa natural del cacao, cacao en polvo y algo de azúcar. El azúcar debería aparecer en los últimos lugares. A veces se añade también extracto/aroma de vainilla o frutos secos. Ambos están permitidos.
Comerlo en moderación
Que un alimento tenga muchos beneficios no quiere decir que pueda consumirse libremente. Algunos hablan del chocolate negro como si de un alimento milagroso se tratara, y tampoco es eso. Debes verlo más bien como un capricho que te puedes conceder sin sentirte culpable.
En primer lugar, el chocolate, además de antioxidantes/polifenoles, fibra, minerales y otras sustancias beneficiosas tiene también otra cosa en abundancia, calorías. Y aunque las calorías son sólo parte de la ecuación, al final importan, y si quieres quemar grasa no debes abusar.
Por ejemplo, 20 gramos de un chocolate 90 por ciento representa 120 calorías, con poco más de un gramo de azúcar. Esta cantidad diaria te permite obtener muchos de sus beneficios sin aumentar excesivamente la ingesta calórica.
Otro problema del chocolate es que puede resultar adictivo, lo cual hace más difícil moderar su consumo. El chocolate de alto contenido de cacao es menos adictivo por su fuerte sabor, demuéstrate que lo comes porque quieres, no porque lo necesitas.
Comer un poco de chocolate negro es darte un gusto, pero no dejes que se convierta en un vicio.
Caterine García es entrenadora personal y chef de alimentación saludable. Síguela a través de las redes sociales de Instagram, Facebook y Twitter como @gogreenandfif