Cuidarse la piel nunca había sido tan sencillo. Estas mezclas están al alcance de tu cocina y de tu bolsillo, y con pocos ingredientes puedes tener uno de los mejores productos para tus necesidades de belleza.
Para exfoliar
La piel va acumulando células muertas lo que no permite que esté suave y esté saludable. Para evitar esto, es importante que exfoliemos la piel de vez en cuando. La siguiente mezcla le permitirá a tu piel verse rejuvenecida y reluciente.
Ingredientes y materiales:
-4 cucharadas de azúcar gruesa
-2 cucharada de aceite de olivo
-15-20 gotas de tu aceite esencial favorito (opcional)
-Un frasco de vidrio limpio
Mezcla todos los ingredientes en el frasco, aplica sobre toda tu piel en la regadera, restregando con movimientos suaves y circulares. Luego enjuaga con agua tibia.
Para los labios
Muchas veces dejamos a un lado el cuidado de los labios. Esta receta es ideal para humectar y rejuvenecer esta parte de la cara.
Ingredientes:
-½ cucharada de azúcar glass (también llamada azúcar en polvo)
-½ cucharada de aceite de jojoba u olivo
-1-3 gotas de aceite de menta o vainilla
Mezcla los ingredientes y aplica sobre los labios. Masajea suavemente de uno a dos minutos y enjuaga.
Para la cara
Esta mezcla le permitirá a tu rostro verse nutrido y humectado, con una apariencia suave y uniforme.
Ingredientes:
- 2 cucharadas de avena -en hojuelas o en polvo-
- 4 cucharadas de leche.
- 3 cucharadas de agua.
- 1 cucharada y media de miel de abeja.
Mezcla muy bien todos los ingredientes en un recipiente hasta lograr una pasta homogénea. Aplícala sobre el rostro (limpio y sin maquillaje) y déjala actuar durante 20 minutos. Retírala con abundante agua. Si te sobra mezcla puedes aplicarla también en el cuello y en las manos siguiendo las mismas indicaciones anteriores.
Para las manos
La siguiente preparación además de ser fácil de preparar es muy efectiva. Recuerda cuidar tus manos constantemente con cremas hidratantes.
Ingredientes:
-1 papa (patata)
-2 cucharadas de miel
-2 cucharadas de leche fría.
Cocina la papa. Una vez que esté lista déjala enfriar y prepara un puré con ella.
Agrega la miel, la leche, y mezcla todos los ingredientes hasta que estén bien integrados.
Coloca la preparación sobre las manos y déjala actuar por 20 minutos.
Enjuaga con abundante agua tibia y seca con una toalla de forma suave.
Para complementar aplica tu crema hidratante de rutina con suaves masajes.
