Briya Public Charter School cuenta con un programa de desarrollo profesional que permite a los padres, en su mayoría mujeres, capacitarse en el cuidado infantil de niños de cero a cinco años de edad, mientras que sus hijos ven clases en la misma institución.
La escuela tiene cuatro sedes en Washington DC dentros de las que también hay la oportunidad de aprender inglés, formarse para asistente médico u obtener un diploma de secundaria, de acuerdo a las necesidades de los asistentes.
Mau Castro Trujillo, directora del Asociado en Desarrollo Infantil (CDA, por sus siglas en inglés), asegura con orgullo que han ampliado su oferta debido a las necesidades y demanda de la comunidad que atiende, en su mayoría latina. De hecho, de los 650 estudiantes en el Distrito, el 75% es de origen hispano.
“Nuestro programa dura diez meses, pero las personas necesitan más de ese tiempo para obtener todos lo requisitos. Les ayudamos a realizar las horas de práctica trabajando con niños y a obtener credenciales como resucitación cardiopulmonar y primeros auxilios, administración de medicamentos y cuidado de infantes. Briya las deja listas para ser evaluadas y obtener la credencial, que hoy día es obligatoria en DC”, dice Castro Trujillo.
Por lo general, según la experiencia de la directiva de origen venezolano, quien tiene cinco años en la institución, las alumnas toman máximo un año y medio en terminar sus certificaciones y estar listas para el campo laboral. “Esto varía porque muchas personas llegan sin experiencia entonces deben empezar desde cero. Hay otras que ya han trabajado con niños y solo necesitan la parte teórica que es lo que ofrecemos”, comenta.

Castro Trujillo es venezolana, con cinco años en Briya y coordina el CDA asequible a personas de bajos recursos

Touré: Además de las clases de los distintos programas, también hay orientación para los padres

De Paula: Esta fue mi primera profesión 54 años atrás. Si tuviera que empezar de nuevo, elegiría hacer lo mismo siempre

Martínez Tavarez tiene dos años estudiando en Briya. Empezó a asistir con su hijo de seis meses.

Andrade (izq) y Hernández, después de finalizar el Asociado quieren continuar con una carrera universitaria en el área
Según explica Bárbara Touré, entrenadora de los maestros, además de las clases de los distintos programas, también hay orientación para los padres, a quienes les brindan una hora de instrucción a la semana sobre diferentes temas vinculados con el desarrollo infantil, cómo prepararlos para que sean exitosos en la escuela y se involucren más con sus actividades.
“Para mí fue la mejor experiencia profesional, ser maestra es servir vidas y pasar vidas a ellas (las alumnas). Yo siempre les digo que estoy aquí no solo enseñando, sino también aprendiendo. Son personas que vienen con tantos valores y conocimiento diferentes y me dan esa oportunidad de aprender más. Esta fue mi primera profesión 54 años atrás y si tuviera que empezar de nuevo, elegiría hacer lo mismo siempre, pues educar es lo que más me gusta”, asevera Gracia De Paula, maestra del programa con siete años en el ejercicio de su cargo.
La docente explica que ha tenido la oportunidad de ver estudiantes que llegaron con tercer grado de educación, pero gracias a su esfuerzo y las herramientas que Briya ofrece como Charter School, de forma asequible, aprendieron inglés, abrieron sus propios negocios, crearon cooperativas para cuidar niños o cuidan a los infantes desde sus hogares. “Muy bien informadas, están siendo acompañadas legalmente por todos los departamentos – de DC – que las guían cómo tener sus emprendimientos”, relata.
“Briya, por ser Charter School, ofrece las clases de manera asequible a la comunidad, tanto las de desarrollo profesional como las de inglés. Creo firmemente en que la educación es la manera de cambiar la sociedad y nuestra comunidad necesita bastante ayuda, recibimos fondos que nos permiten apoyar en distintas áreas”, afirma Castro Trujillo.
Historias como las de Marisela Martínez Tavarez, Alba Hernández y Carmen Andrade, son comunes dentro del recinto educativo. Ellas aprovechan la oportunidad de realizar un Asociado por el que pagaron $250 una sola vez, pero en otros estados vecinos puede superar los mil dólares. También tienen acceso a asesoría legal, ya que la escuela cuenta con fondos locales para apoyar a sus estudiantes con sus casos migratorios.
“Quiero sacar el certificado para trabajar en un Day Care, la verdad me encantan los niños. Briya es algo maravilloso, es una ayuda muy especial tanto para las familias como para uno”, esgrime Martínez Tavarez, una mexicana que llegó hace seis años al país, pero en 2015 decidió iniciar sus estudios de inglés, a los que asistía mientras que en otro salón cuidaban a su hijo de seis meses.
Por su parte, Hernández y Andrade, originarias de Guatemala y Chile respectivamente, quieren continuar con una carrera universitaria en el área, cuando finalicen el programa, que no discrimina a sus participantes. De hecho, al ingresar, no se pregunta por el estatus migratorio, sin embargo, para ejercer el oficio, una vez finalizados los estudios deben estar habilitadas legalmente para trabajar el Distrito de Columbia.
Las inscripciones para las clases de inglés están abiertas durante todo el año, pero para el CDA se realizan entre mayo y septiembre. Si desea más información puede llamar a los teléfonos (202) 420-7200 y (202) 233-7777.