Los frutos secos o semillas como las almendras, las nueces, los pistachos, las pacanas, las semillas de calabaza, las semillas de girasol, avellanas y los cacahuetes contienen una gran cantidad de nutrientes saludables. Estas semillas también se caracterizan por tener bajo contenido en agua.
Solo un puñado de ellas contiene una gran cantidad de vitaminas, minerales y grasas buenas, que funcionan en conjunto para cuidar tu corazón, tu cerebro y tu peso. Tan solo 1 onza al día puede disminuir la inflamación y proporcionar fibras, proteínas y minerales que mejoran el sistema inmune.
Contienen grasas saludables para el corazón. Las nueces y las semillas contienen grasas saludables mono y poliinsaturadas, las cuales son esenciales para la salud para el control de la inflamación y el mantenimiento de la estructura normal de cada célula de nuestro cuerpo. Las grasas saturadas y trans, que se encuentran en las carnes, productos lácteos enteros, alimentos fritos y procesados, pueden dañar nuestro cuerpo al producir la inflamación. Estudios demuestran que las dietas altas en estas grasas no saludables pueden conducir a una serie de enfermedades. Elegir grasas saludables en su lugar puede reducir el colesterol y disminuir la inflamación de las células.
Son una gran fuente de fibras. Los frutos secos benefician la salud al proporcionar una fuente de fibra alimenticia. La fibra es un tipo especializado de carbohidrato que se encuentra en alimentos a base de plantas. No se descompone a medida que pasa a través del tracto digestivo, y la fibra no digerida agrega volumen a la materia fecal para promover movimientos intestinales regulares. La fibra también ayuda a disminuir el proceso de digestión, lo que significa que el azúcar de la comida ingresa al torrente sanguíneo lentamente, lo que lleva a un aumento gradual del azúcar en la sangre que lo permite la saciedad por más tiempo y permite a la persona estar llena de energía después de comer.
Aportan muchos minerales. Las nueces y semillas contienen minerales como magnesio, zinc, calcio y fósforo necesarios para el desarrollo óseo, el sistema inmune y la producción de energía. Un estudio de Nurses’ Health encontró que las personas que consumieron la mayor cantidad de magnesio, alrededor de 350 miligramos por día, tenían significativamente menos inflamación celular que aquellos con la ingesta más baja. Este tipo de inflamación está relacionada con casi todas las enfermedades y tiene vínculos directos con la enfermedad cardíaca y la diabetes tipo II. Una onza de semillas de girasol contiene 100 mg de magnesio. El calcio es un mineral necesario para el desarrollo óseo, pero también es necesario para enviar señales a las células y producir energía. Una onza de almendras proporciona 75 miligramos de calcio.
Previenen enfermedades. Una dieta rica en frutos secos también ayuda a mantenerse saludable al pasar de los años, evitando la aparición de enfermedades. Las personas que consumen frutos secos con frecuencia tienden a pesar menos que aquellos que rara vez comen nueces, y también enfrentan un menor riesgo de aumento de peso en el futuro.
No necesitan preparación, son fáciles de encontrar y de llevar. Además de tener una gama de opciones para elegir, los frutos secos se pueden comer solos, algunos se pueden convertir en otros alimentos como la mantequilla de maní o la leche de almendras, o se pueden agregar a las comidas.
