El país gobernado por Nicolas Maduro queda con poca posibilidad de maniobra para el transporte de crudo hacia sus mercados mas cercanos Aruba, Bonaire y Curacao. PDVSA no quiere arriesgar sus tanqueros y los regresa antes de que sean embargados en Bonaire, Curacao y Aruba.
En un detallado trabajo publicado por Reuters, la periodista venezolana, Mariana Párraga, describe la intensa persecución de activos petroleros por parte de las empresas Rusoro y Conoco, cuyas demandas ante la Corte Internacional de Arbitraje por expropiaciones de activos no cancelados han sido ganadas.
Solo en la refinería en Curacao se procesan 350 mil barriles diarios y Conoco intenta embargar tanto el crudo venezolano que llegue a la isla cómo cualquier otro activo en que sea propiedad de Petróleos de Venezuela (PDVSA). Lo mismo aplicaría en las otras islas (Aruba y Bonaire) que también son regidas por leyes holandesas.
Una fuente conocedora del tema de arbitraje internacional le confirmó a El Tiempo Latino que ya PDVSA tiene embargado varios tanqueros en distintos puertos internacionales y varios acreedores siguen alertas para ubicar activos que puedan ser confiscados.
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