En la que fue apenas la tercera ocasión que se registra a un asteroide con dirección directa hacia la Tierra, este lunes uno de dos metros de diámetro se desintegró sin causar daños sobre territorio africano.
De acuerdo con AP, este fue descubierto por especialistas durante el fin de semana, sumándose así a los fenómenos de 2008 y también de 2014.
El asteroide fue nombrado 2018 LA y fue visto por primera vez el sábado cuando se encontraba cerca de la órbita de la luna. Inmediatamente, los especialistas en la materia determinaron que este tenía una trayectoria directa hacia la Tierra.
Sin embargo, desde la NASA señalaron que se trataba de un objeto lo suficientemente pequeño para no crear alarma en la población, por lo que, como terminó ocurriendo, este se desintegraría al entrar en la atmósfera.
Como lo explicó Lindley Johnson, oficial de defensa planetaria de la NASA, no se reveló nada hasta el momento porque era “un objeto de mucho menor tamaño del que nos corresponde detectar y advertir”.
Pese a que en un principio desde la NASA habían confirmado que la zona de impacto podría extenderse entre el sur de África hasta el Océano Atlético, este llegó a terreno continental, quemándose sobre el cielo de Botsuana.
