Sixto Henry Veras fue hallado sin vida el pasado sábado en Managua, capital de Nicaragua, en un hecho que levantó sospecha en las autoridades, pues las características del caso demostraron que no se trató de simples delincuentes los protagonistas del asesinato.
Luego de una serie de investigaciones por los cuerpos policiales, estos determinaron que el ciudadano de origen estadounidense fue asesinado a manos de dos jefes de pandilla que hacen vida en la región, como informó la agencia EFE.
Así, las pesquisas revelaron que los autores del hecho fueron Néstor Tiffer y Ezequiel García.
En el caso, indicaron que Vera, de 48 años de edad y oriundo de Nueva York, viajaba junto a Marcos Pomares, cuando los pandilleros interceptaron a los hombres para despojarlos del automóvil donde viajaban, pero al resistirse, estos los atacaron.
Se demostró que el occiso recibió un disparo en la cabeza, mientras que su acompañante sufrió graves lesiones. Luego de haber cometido el crimen, los antisociales incendiaron el carro donde se desplazaba el estadounidense.
Los cuerpos de seguridad seguirán haciendo las investigaciones correspondientes, pues, según dieron a conocer, Vera, quien era propietario de un restaurante en Managua, fue llamado de emergencia para informarle que un amigo había sido herido; no obstante, al salir del local fue interceptado por los pandilleros.
