Este lunes, un hombre asesinó a cuatro de niños, de edades comprendidas entre 1 a 11 años, con los que llevaba 24 horas atrincherado en un apartamento ubicado en Orlando, Florida. Poco después de ejecutar el crimen, se suicidó, según informaron autoridades este martes.
“Hemos entrado en el apartamento y hemos encontrado que los cuatro niños han sido asesinados por el sospechoso con aparentes disparos”, explicó en rueda de prensa el jefe de la Policía de Orlando, John Mina.
A pesar de la información otoragda, Mina dijo que aún “no tenemos ni idea de cuando murieron los niños”, que tenían 1, 6, 10 y 11 años.
Según reseña la agencia de noticias EFE, todo comenzó la noche del domingo, cuando la novia del sospechoso, identificado como Gary Wayne Lindsey Jr. -quien posee antecedentes penales por incendios y otros delitos- llamó a la Policía por violencia doméstica.
A pesar de que la mujer huyo del apartamento, dejando atrás a los cuatro niños, dos de ella y los otros dos del asesino, los policías llegaron al complejo residencial para atender la situación.
Sin embargo, el sospechoso disparó e hirió de gravedad a uno de los agentes, Kevin Valencia, dando inicio a un atrincheramiento que se prolongaría hasta la noche del lunes.
Aunque el asesino estuvo en contacto “directo e indirecto” con la polícia para negociar su entrega, un agente se percató del cuerpo sin vida de uno de los niños dentro del apartamento, por lo que las autoridades decidieron iniciar un operativo de rescate del resto.
Pero, lamentablemente, hallaron muertos a los niños y también a Lindsey, de un aparente suicidio, según relató Mina.
Con información de EFE.