El Fiscal General de Estados Unidos otorgó declaraciones en su defensa ante las críticas que se han desplegado desde ciertos gremios, asociaciones e instituciones como la Iglesia por el plan “tolerancia cero”.
Ante esto aseguró que es “una oportunidad histórica para arreglar un sistema de inmigración” que a su criterio “se ha roto durante décadas” porque “las élites y los expertos de Washington han priorizado los intereses de ciertos intereses corporativos y grupos de activistas sobre lo que es mejor para el pueblo estadounidense”.
Asimismo dijo que esto ha sido ampliamente demandado a los funcionarios electos. Parte del control viene porque durante los últimos cinco años, solo el 20% de las solicitudes son meritorias después de la reglamentaria audiencia ante un Juez de Inmigración.
Por otro lado, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los EEUU considera que un 15% no es válido durante la evaluación inicial.
“Desde el 2009, el Departamento de Seguridad Nacional revisó más de 5.000 evaluaciones iniciales de asilo. Para 2016, sólo siete años después, ese número había aumentado a 94,000”, indicó el fiscal.
También agregó que “el número de estos extranjeros colocados en los procedimientos judiciales de inmigración pasó de menos de 4,000 a más de 73,000 en 2016, casi un aumento de 19 veces”.
Lo cual se “agravó” después de que la administración anterior no procesara a los inmigrantes ilegales que ingresaron al país con niños: “Cada vez más extranjeros ilegales comenzaron a aparecer en la frontera con niños”.
“En 2013, había menos de 15.000 unidades familiares detenidas cruzando nuestra frontera ilegalmente entre los puertos de entrada. Cinco años después, fue más de 75.000. Ni siquiera tenía que ser su hijo, podría ser cualquiera. Puedes imaginar los horribles abusos que resultaron”, aseguró el Fiscal.
Después de explicar esto, tildó de “descaro” que ante esta situación ataquen “a aquellos de nosotros que queremos poner fin a esta anarquía y los peligros que enfrentan estos niños”.
Otro aspecto que a consideración del Fiscal agravó la situación fue el momento en que el expresidente Obama “usó su pluma y su teléfono para hacer algo que dijo que legalmente no podía hacer”.
“En julio de 2012, el presidente Obama anunció que otorgaría estatus legal a 800,000 inmigrantes ilegales, junto con la autorización de trabajo y otros beneficios, como la Seguridad Social. El Congreso rechazó esta propuesta en múltiples ocasiones, pero el presidente Obama lo hizo de todos modos”.
Según el Fiscal, después de eso el número de niños extranjeros no acompañados que llegaron a nuestra frontera se duplicó por año porque “las redes criminales” difundieron “la mentira” de que los niños podrían obtener la amnistía, trayendo “terribles consecuencias humanitarias”.
Por la situación, dijo que la administración de Trump está trabajando para restablecer la legalidad del sistema, pero que ha habido mucha desinformación sobre lo que se está haciendo en el Departamento de Justicia.
Por lo que se permitió aclarar la situación:
- Aseguro que si están siguiendo una política de persecución de “tolerancia cero” en la frontera porque según las leyes del país, la entrada ilegal es un delito menor y reingresar después de haber sido deportado es un delito grave.
“Según la ley, se supone que debemos enjuiciar estos crímenes. En consecuencia, he ordenado a nuestros fiscales que persigan el 100% de las entradas ilegales en la frontera del sudoeste que DHS nos refiere”, indicando que tener hijos no da inmunidad de arresto y enjuiciamiento.
Las personas que tengan niños al ser detenidos deben saber que estos no seran envidos a cárcel: “Serán puestos bajo custodia del Departamento de Salud y Servicios Humanos dentro de las 72 horas” como lo exige la ley.
“Cientos de niños mueren cada año tratando de llegar a la frontera para ingresar ilegalmente a este país. En muchos casos, las bandas de delincuentes trafican, abusan de ellos o los reclutan”, puntualizó.
- En septiembre pasado, la administración de Trump puso fin a DACA, un programa que daba estatus legal a hijos inmigrantes porque “no tenían la autoridad legal para otorgar un estatus legal a los inmigrantes ilegales sin el Congreso. Es por eso que esta política ilegal ha terminado”.
Asimismo dijo que “ahora que DACA terminó, los delincuentes no pueden difundir la mentira de que los niños pueden obtener la amnistía” porque la manera de detener esto es que “la gente deje de contrabandear niños” porque deben “aplicar para ingresar legalmente y esperar su turno”.
- Devolvieron el proceso de asilo “a lo que el Congreso pretendía que fuera”.
“Si no cumple con los requisitos de asilo en este país, entonces no recibirá el asilo aquí. Esa no debería ser una idea controvertida”, remarcó.
- Con respecto a las críticas de la Iglesia dijo que no están separando familias porque cuando las personas son detenidas, por cualquier razón, no se llevan a sus hijos a la cárcel con ellos.
“Ellos son los que violaron la ley, son ellos quienes pusieron en peligro a sus propios hijos en su viaje. Los Estados Unidos, por otro lado, hacen todo lo posible para protegerlos mientras los padres atraviesan un breve período de detención”, aseguró el Fiscal.