La crisis que aún vive Nicaragua tras una serie de protestas contra el régimen del presidente Daniel Ortega y que derivó en la muerte de más de 200 ciudadanos, hechos que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hizo responsable al gobierno, sigue siendo objeto de críticas.
La última de vino de parte de la Unión Europea, que este martes a través de una delegación presente en el país centroamericano y ante el Sistema de la Integración Centroamericana, exigió el “cese de la violencia y toda represión” en dicho territorio.
De acuerdo con EFE, en una declaración revelada por parte del organismo, pidió cumplir con lo expuesto en el informe de la CIDH, haciendo énfasis en el tema de los hechos violentos que han enlutado a todo un país.
Asimismo, la Unión Europea aseguró que “está consultando con sus Estados Miembros la mejor forma de apoyar” al diálogo que la oposición retomó recientemente con el gobierno y que tiene a la Conferencia Episcopal de Nicaragua como mediadora.
Además, celebró “la próxima llegada del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes y el Alto Comisionado de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas”.
En su informe, la CIDH indicó que el régimen de Ortega es responsable de varias violaciones de derechos humanos, texto que incluye “asesinatos, ejecuciones extrajudiciales, malos tratos, posibles actos de tortura y detenciones arbitrarias cometidos en contra de la población mayoritariamente joven del país”.