Sumado al trauma de la deportación, niños estadounidenses que se ven obligados a dejar el país cuando sus padres son deportados enfrentan otros retos en la tierra de sus progenitores: trabas para recibir servicios básicos de salud y educación debido a que carecen de documentación apropiada, dicen funcionarios.
Por esta razón el Departamento de Estado de Estados Unidos insta a los padres inmigrantes a tramitar el pasaporte de sus hijos ciudadanos antes que sea tarde y complicado. Mientras que los consulados latinoamericanos de países que mantienen la doble ciudadanía promueven que los niños sean registrados también como ciudadanos del país de sus padres.
“Hay miles de niños nacidos acá en EEUU que ya están viviendo con sus padres en otros países. Y se ha visto que por no tener sus documentos es muy difícil que puedan matricularse en las escuelas o que reciban atención médica”, expresó a El Tiempo Latino, el portavoz del Departamento de Estado, Andrés Rodríguez quien está al frente de la campaña para que los menores estadounidenses nacidos de padres extranjeros obtengan su pasaporte.
Complicaciones fuera de EEUU
“Es muy importante que realicen trámite en territorio estadounidense, especialmente cuando los padres son indocumentados, porque al ser deportados es muy difícil obtener el pasaporte fuera del país”, agregó Rodríguez.
Muchos padres se muestran renuentes a solicitar pasaportes de EEUU para sus hijos ciudadanos estadounidenses debido a su estatus de ex indocumentados.
Otros padres enfrentan dificultades para acceder a formularios y materiales de solicitud o presentar solicitudes en persona en oficinas consulares de EEUU debido al gasto o las dificultades logísticas.
Campaña impulsada por situación en México
IMPORTANTE. Rafael Laviaga, cónsul de México, en Washington, DC enfatiza la importancia de la doble nacionalidad para los niños nacidos en EEUU de padres mexicanos.
La campaña surgió a raíz del gran número de niños estadounidenses que tienen que migrar a México a raíz de la deportación de sus padres.
En la década pasada, el número de menores estadounidenses en México se incrementó a más de 600 mil, de acuerdo con datos del Departamento de Estado citados por Geoffrey J. Martineau, jefe de Oficina de Servicios a Ciudadanos Estadounidenses y Manejo de Crisis para el hemisferio occidental del Departamento de Estado.
En muchos casos no requieren de pasaporte porque viajan por vía terrestre presentando sólo la partida de nacimiento o matrícula consular.
“El ir a los países de sus padres sólo con el certificado de nacimiento no es suficiente”, dijo Rodríguez. Desafortunadamente, algunos de los niños estadounidenses en México llegan a la edad adulta sin otro documento de identidad que el certificado de nacimiento en Estados Unidos.
En muchos casos es bastante difícil, una vez que alcanzan la mayoría de edad, que las oficinas consulares estadounidenses establezcan su identidad tomando el elevado riesgo de fraude de identidad, de acuerdo con el Departamento de Estado.
Por su parte el cónsul de México en Washington, DC, Rafael Laveaga, explicó que su país permite la doble ciudadanía por lo que instó a los padres a registrar a sus niños también como mexicanos y tramitarles el documento. “Es importante que los niños nacidos en Estados Unidos de padres mexicanos obtengan su pasaporte mexicano y americano si es que van a regresar a México. Hay que recordar que un requisito fundamental para obtener un pasaporte es el original del Acta de Nacimiento. Por ello, en los consulados de México estamos a sus órdenes para tramitar el acta mexicana a quienes, habiendo nacido en Estados Unidos, son hijos de padre o madre mexicana”, dijo el cónsul.
Después de los salvadoreños, los mexicanos en el área de Washington son la segunda comunidad más grande, según datos del Hispanic Pew Center y el Migration Policy Institute (MPI).
El cónsul Laveaga dice que los mexicanos en DC, Maryland, Virginia y West Virginia son alrededor de 250 mil. Los salvadoreños se estiman en 500 mil.
Niños estadounidenses con padres indocumentados
Según el Pew Hispanic Center, cada año nacen 300 mil niños en hogares con al menos un padre indocumentado. Otros datos dicen que en total son casi 6 millones de menores que viven con uno de sus padres sin estatus migratorio legal, de acuerdo al American Immigration Council (AIC).
Las deportaciones anuales se mantienen a un ritmo de 360 mil al año, según cifras de 2016.
“En caso que los padres sean deportados, los niños nacidos aquí necesitan estar protegidos como ciudadanos estadounidenses”, expresó Rodríguez.
Más problemas con el fin del TPS
La situación de las deportaciones se podría agudizar con el fin del Estatus de Protección Temporal para los inmigrantes de El Salvador, Honduras y Haití. Estos perderán el beneficio en 2019, quedando expuestos a la deportación, de no regularizar su estatus por otra vía. Se estima que 273 mil niños nacidos en Estados Unidos, tienen un padre que cuenta con el TPS.
“Precisamente, los padres deben prevenir y gestionar los documentos de sus hijos con tiempo, en caso que tengan que viajar por una u otra razón a su país”, expresó Rodríguez, al señalar que también se debe evitar dificultades en caso de que en un futuro los menores retornen a EEUU.
“No preguntamos estatus del padre”
El portavoz del Departamento de Estado enfatizó que los padres indocumentados no deben temer al tramitar el pasaporte estadounidense para sus hijos nacidos en este país. “En ningún momento, nosotros preguntamos el estatus migratorio de los papás”, dijo Andrés Rodríguez.
“Lo que sí pedimos es un documento de identidad. Puede ser el pasaporte vigente de su país, matrícula consular o el DUI en caso de los salvadoreños”, agregó.
Para que un menor que califique obtenga el pasaporte estadounidense, se necesita:
• El certificado de nacimiento del menor.
• Identificación de ambos padres. Puede ser el pasaporte de su país de origen, matrícula consular o DUI (Documento Único de Identidad).
• Dos fotos tamaño pasaporte.
• Ambos padres deben estar presentes. “Pero si uno de ellos no lo está puede llenar un formulario o escribir una carta autorizando al otro padre para realizar el trámite”, dijo Rodríguez.
• El costo es de $80 para los menores de 16 años. Se suma $25 por concepto de gastos de gestión que solo hay que pagar cuando se aplica por primera vez, no al renovar. En total es $105.
• Tarjeta de pasaporte. “Si los padres no pueden pagar, pueden optar por la versión de la tarjeta, cuyo precio es menor”, dijo Rodríguez. El costo es $15 más los $25 por gastos de gestión.
Para más información visite: www.travel.state.gov/pasaporte o llame al 1877-487-2778