Fernando Haddad es un filósofo de izquierda de 55 años. Es el sustituto de Luiz Inácio Lula da Silva en la fórmula presidencial del Partido de los Trabajadores.
Con la intención de convertirse en el nuevo presidente de Brasil por los próximos 13 años, busca conquistar a los ciudadanos que ejercen su derecho al voto este domingo 7 de octubre.
Haddad acaba de asumir la responsabilidad de sustituir al principal líder de la izquierda brasileña, preso desde abril por corrupción pasiva y blanqueo de fondos, e impedido de disputar la elección por la Corte Electoral, tras agotar todos los trámites en busca de su libertad y por su candidatura.
Fue alcalde de São Paulo desde 2013 hasta 2017. Actualmente busca apoderarse de la presidencia como el heredero de Lula, quiera era el favorito con 39% de aceptación en las encuestas.
Haddad también enfrenta acusaciones. El empresario Ricardo Pessoa confesó que su constructora, UTC, pagó una deuda de unos 540 mil euros de su campaña a la alcaldía, a cambio de contratos públicos. Para el aspirante presidencial, esta acusación se trata de una persecución política para perjudicarlo.
Según los estudios de opinión, Haddad es el único de los candidatos que pudiera perder frente a Jair Bolsonaro, candidato de derecha.