El sueño de muchos migrantes que conforman la caravana rumbo a Estados Unidos tiene un nuevo reto: 90 kilómetros de recorrido hasta la localidad de Isla, en el estado mexicano de Veracruz.
Este sábado, el grupo de ciudadanos centroamericanos, en su mayoría hondureños, partió a esta localidad luego de que en principio se planificara si ida hasta Ciudad de México, algo que no logró ser posible por los problemas de agua en la región azteca.
El viernes, y de acuerdo con información de la agencia de noticias AFP, la caravana tenía entre sus planes llegar a la zona mencionada a través de autobuses que les prometió el gobierno regional de Veracruz; sin embargo, la problemática con el líquido cambió la ruta.
Miguel Ángel Yunes, gobernador de la entidad, señaló que irán a “una ciudad grande, donde podamos tener instalaciones adecuadas que les brinden sobre todo seguridad”.
Asimismo, un segundo grupo aún estaba instalado en el sur de México, en Chiapas.
El mal tiempo impidió que avanzaran, quedándose un día más de lo normal en la región mexicana, donde esperan seguir hasta cumplir con su meta de cruzar a través dela frontera sur hacia Estados Unidos.
