Los migrantes que ingresen de forma ilegal a Estados Unidos por sus fronteras no podrán aplicar a solicitudes de asilo, de acuerdo con una nueva proclama presidencial difundida este viernes.
El presidente Donald Trump restringe así la entrada irregular a Estados Unidos por 90 días. Quien incumpla la normativa pierde su elegibilidad para obtener asilo; en cambio, quienes crucen por puertos autorizados de entrada si serán elegibles.
La proclama fue firmada en la mañana de este viernes, afirmó Trump a reporteros cuando partía de la Casa Blanca rumbo a París, Francia, reseñó CNN.
La medida entra en vigencia cuando se acercan varias caravanas de migrantes a la frontera sur de México. Los ciudadanos huyen de la pobreza y de la violencia en sus países de origen, principalmente desde el Triángulo Norte.
“La llegada de un gran número de extranjeros contribuirá a la sobrecarga de nuestro sistema de inmigración y asilo y a la liberación de miles de extranjeros en el interior de los Estados Unidos”, se lee en el documento.
Trump también condenó que muchos ciudadanos que ingresan a Estados Unidos, con una solicitud de asilo en marcha, faltan a sus citas en tribunales para decidir sus futuros.
“La continua migración masiva de extranjeros sin base para el ingreso a los Estados Unidos a través de nuestra frontera sur ha precipitado una crisis y socava la integridad de nuestras fronteras”, agregó.