A menos de dos meses de los comicios electorales en El Salvador, asegurar un ganador de la silla presidencial es una apuesta arriesgada. Los candidatos Carlos Calleja de Arena, Hugo Martínez del FMLN, Nayib Bukele de GANA y Josué Alvarado de Vamos no han logrado reducir el porcentaje de indecisos en esta campaña electoral. Por el contrario, el número es mayor en esta elección que en las presidenciales de 2009 y 2014.
Al obtener la mediana de las encuestas de las dos elecciones anteriores y la de 2019 los resultados evidencian que en 2009, cuando competían por la presidencia Rodrigo Ávila de Arena y Mauricio Funes del FMLN, había un 21% de salvadoreños indecisos reflejados en las encuestas de la época.
El término “indeciso” se le ha otorgado a aquellos que no eligen una opción de candidato al momento de responder una encuesta. Sin embargo, este porcentaje engloba las categorías: no sabe, no responde, no elige y voto secreto. Este último implica una decisión que el encuestado decide no revelar.
En las encuestas de 2014, en las que los candidatos presidenciales fueron Norman Quijano de Arena y Salvador Sánchez Cerén del FMLN, el punto medio de los indecisos en las encuestas fue de 29,8%. Es decir, 8,8 puntos porcentuales más que en las encuestas de 2009.
Para las elecciones del próximo 3 febrero de 2019 hay varias encuestas que han intentado mostrar una inferencia en el resultado sobre la intención de voto de los salvadoreños.
Entre estos resultados hay algunas encuestas que reflejan la mitad o más de la mitad de la muestra indecisa. La mediana de los sondeos de 2019 es de 46,9% de salvadoreños indecisos. Esto explica por qué en la mayoría de las encuestas hechas entre 2017 y este año el porcentaje de indecisos supera el porcentaje de quienes sí revelan su preferencia por un partido.
La encuesta hecha por CID Gallup, en enero de este año, pone a la cabeza de los resultados, no a un candidato presidencial sino a aquellos que no saben, no responden o no revelan al candidato de su preferencia.
Ante la pregunta: “Si las elecciones fueran el próximo domingo, ¿cuál es el partido preferido suyo?”, 56% de los encuestados no dio una respuesta. Ese porcentaje es el más alto registrado en 21 encuestas desde 2008. Es decir, desde las últimas dos elecciones presidenciales.
Ese porcentaje se redujo a 51% para septiembre de este año y a 41,2% en noviembre. Este último fue el resultado de la encuesta publicada por LPG Datos. Esto sin contar el voto secreto que suman 5,7% más.
Para Álvaro Artiga, profesor de Sociología y Ciencias Políticas de la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas”, no hay duda de que el incremento de salvadoreños que no han tomado una decisión para el próximo 3 de febrero es notorio.
“A diferencia de años anteriores, hoy hay más gente que no encuentra opción y puede que no vaya a votar. Esto puede ser un indicador de que podamos tener menor participación en esta elección (…) Probablemente hay mucha gente que no cree en los partidos políticos, pero tampoco cree en Bukele”, dijo Artiga.