La salida de Paul Ryan de sus labores como presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos estuvo acompañada de unas palabras hacia sus compañeros, discurso destinado a poner a un lado los problemas y trabajar en las soluciones.
El republicano, de acuerdo con información de la agencia de noticias EFE, aseguró sentirse orgulloso de sus labores al mando.
Ryan lamentó que “demasiado a menudo (hay) desencuentros legítimos (que) llevan rápidamente a desconfianzas intensas”.
Asimismo, recordó que “el estado de la política estos días es otra pregunta, y francamente una para la que no tengo respuesta”.
Pero pese a tanta problemática, el republicano pidió a todos acabar con tanto orgullo y establecer relaciones con los políticos del bando rival.
“Conozcan a la gente que hay al otro lado, conózcanse de forma personal, (…) ayuda”, recomendó.
“Gastamos mucho más tiempo intentando condenarnos los unos a los otros que desarrollando nuestras convicciones”, expresó, agregando además que “este tipo de política comienza en un lugar de desafuero”.