La Cámara de Representantes aprobó este jueves un paquete de proyectos de ley que reabrirían el gobierno federal sin pagar el muro fronterizo del presidente Trump, lo que provocaría una rápida amenaza de veto por parte de la Casa Blanca y dejaría que la paralización parcial no estuviera más cerca de ser resuelta.
Sin embargo, dos senadores republicanos que se postularon para la reelección en 2020 rompieron con los líderes de Trump y del partido en su estrategia de cierre, diciendo que era hora de poner fin al estancamiento, incluso si los demócratas no le dan a Trump los más de 5.000 millones de dólares en fondos para la frontera que está exigiendo.
Los comentarios de Sens. Cory Gardner (Colo.) y Susan Collins (Maine) – los únicos senadores republicanos que se postulan para la reelección en los estados que Trump perdió – señalaron las fisuras dentro de los republicanos que podrían crecer a medida que el cierre se aproxima a la fecha límite de las dos semanas. El líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), reiteró este jueves que el Senado solo se ocupará de la legislación de gastos del gobierno que Trump apoya.
La postura de McConnell provocó ataques de enojo este jueves por parte de la nueva presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (demócrata de California) y otros demócratas, quienes insistieron en que estaban tratando de dar a los republicanos una salida al estancamiento mediante la aprobación de dos proyectos de ley: uno de ellos, un paquete de seis proyectos de ley de gastos que se negociaron de manera bipartidista en el Senado y que reabriría casi todas las agencias federales cerradas a partir del 22 de diciembre, y el segundo, un proyecto de ley de gastos de ventanilla hasta el 8 de febrero, cubriendo solo el Departamento de Seguridad Nacional.
Con información de The Washington Post