En tan solo ocho días el asesinato de líderes sociales ha vuelto a ser el tema del que más se habla debido a que en solo ocho días de 2019 han muerto seis de ellos. La cifra volvió a prender las alarmas por la sistematicidad en la que se han presentado los hechos.
El asesinato de la líder Maritza Quiroz, que luchaba por la restitución de tierras, enlutó al país. Ese fue el sexto crimen que se cometió en seis días.
Aunque el país rural vive un ambiente que no es propicio para la lucha social, otros sectores de la sociedad también han sentido la violencia creciente aunque no se trate de líderes sociales. En los primeros cinco días de este año asesinaron a dos mujeres trans en el Valle del Cauca en situaciones sospechosas que están siendo investigadas.
Al principio se creía que Laura estaba desaparecida. Pero a los ocho días, después de una larga búsqueda por parte de la policía, encontraron su cuerpo en un apartamento del barrio San Bosco, en el centro de Cali, y cuyo propietario es José Pinto Duarte, pareja de Laura.
Los vecinos le contaron a la policía que sabían de amenazas por parte de Duarte hacia su pareja. El cuerpo de Laura fue encontrado con signos de tortura y heridas producidas por arma blanca. Según su agresor, Laura pretendía robarle pertenencias de su apartamento. Ahora Duarte está en la cárcel por el delito de homicidio.
Históricamente Colombia se ha rajado en la protección a personas de la comunidad LGBT. En 2017, 109 personas perdieron la vida, 41 de esos casos se dieron por prejuicios y homofobia.
El otro escabroso caso se presentó en el mismo departamento, esta vez en Tuluá. A Karla, de 23 años, la citaron a su muerte por una llamada. Los homicidas la hicieron llegar al sector de Tres Esquinas, allí le dispararon cuando se movilizaba en una motocicleta. Luego huyeron del lugar.
De inmediato Karla fue llevaba a urgencias al hospital más cercano, pero su vida se escapó debido a las profundas heridas que tenía en su cuerpo.
Karla trabajaba como modelo webcam y, al igual que Laura, era una mujer trans. Vivía en Calí y se encontraba en Tuluá porque estaba visitando a su familia. El Valle del Cauca es el segundo departamento que más casos de asesinatos a la comunidad LGBT presenta en el país, Antioquia ocupa el primer lugar.
Con información de Semana