ir al contenido

Playoffs de la NBA: cuatro equipos siguen en carrera

Cuatro equipos se han ido y otros cuatro quedan con vida en la temporada 2018-2019 de la NBA. Solo uno de ellos repite, los Warriors de Golden State, favoritos a alzar el título. Pero para lograrlo deberán frenar el envión de otros cuadros con el entusiasmo de haber dejado atrás a grandes franquicias en series históricas que ponen la vara muy alta para la etapa previa a las finales.

Con las finales de conferencia en desarrollo, es fácil apuntar a solo dos de ellos y saborear la definición de una zafra que promete tener una última etapa cargada de emociones.

Además de los californianos, Trail Blazers de Portland, Raptors de Toronto y Bucks de Milwaukee saltan al tabloncillo con la misión de meterse en la recta final del calendario de la liga.

Séptimos juegos para el recuerdo

Dos de las cuatro llaves que vienen de culminar se resolvieron en el séptimo duelo, el de matar o morir y que vio salir airosos del choque a Portland y Toronto.

El primero de ellos apeó como visitante a los sorprendentes Nuggets de Denver, segundos en el Oeste durante la ronda regular y una de las franquicias más prometedoras de toda la liga por su núcleo joven, además de una dinámica veloz amparada en la agilidad de su interno, Nikola Jokic, dueño del espectáculo en el Pepsi Center.

Pero eso no fue suficiente para frenar en el encuentro de la definición a CJ McCollum, escolta de la visita, quien se echó en el hombro al quinteto para acabar con las opciones de los segundos sembrado y volver a las finales del Oeste por primera vez desde el año 2000.

Con victoria por 100 a 96, los Trail Blazers tuvieron en McCollum a su héroe, alguien que se había asomado con coraje en la serie para apoyar a la gran figura de la organización, Damian Lillard.

El escolta sumó 37 unidades en 45 minutos de juego, siendo el líder anotador por los suyos.

Su actuación sirvió para trascender en la temporada, algo que no pudo hacer Lillard al menos en esta llave, estéril en el séptimo choque con solo 13 tantos. No obstante, poco o nada se le reprocha al base, fulminante en la serie previa contra el Thunder de Oklahoma City y dueño de una de las mejores jugadas de los playoffs, aquella con la que eliminó a través de un largo triple a la tropa de Russell Westbrook.

El otro cuadro que mantuvo su ritmo y sigue con vida en la campaña son los Raptors, conjunto que avanzó de la manera más agónica posible, pues se consagraron con una canasta de Kawhi Leonard en el último suspiro, una acción cuyas reproducciones a través de plataformas de videos y redes sociales alcanza el millar de vistas.

El destacado alero, quien podría ser agente libre al terminar el paseo de la 2018-2019, silenció a los 76ers de Filadelfia con un tiro que tocó un par de veces el aro antes de entrar. Mientras eso pasaba, el tiempo había terminado. Era eso o la prórroga, pero el balón y el destino se decantaron a favor de los canadienses.

La labor de aquella noche en casa quedó marcada por la buena defensa, en una estrategia que desencajó a la visita. Con hombres altos que dominaron la pintura y entregaron varias oportunidades extras a su ofensiva, los Raptors se hicieron con un boleto que en el papel los hacía favoritos, pero que encontró en el camino irregularidades causadas por el talento de sus contrarios.

En Filadelfia aún confían en el proceso, ahora con piezas más maduras. Joel Embiid y Ben Simmons demostraron ser estrellas y la adición de Jimmy Butler obligará a la franquicia a hacerle una gran oferta para mantenerlo al menos un año más en su plantilla.

Ganar sin una estrella

Para los Warriors parece no haber techo. Los dirigidos por Steve Kerr mostraron grietas ante un fuerte rival como los Clippers de Los Ángeles. Ese hecho despertó la esperanza de sus siguientes adversarios, Rockerts de Houston, cuadro que estuvo a un triunfo de dejarlos fuera en las finales del Oeste en la 2017-2018.

Pero al final del día son los de Golden State los dueños de la última palabra.

Al igual que contra los angelinos, fueron necesarios seis encuentros para pasar, ahora con mayor certeza en su juego, nuevamente con el perímetro como gran aliado, y dejando claro que un solo hombre no es capaz de acabar con su dominio.

Esto aplica por partida doble: James Harden, reinante MVP de la liga y líder anotador de la ronda regular, no fue suficiente ante un verdadero conjunto que busca ampliar su dinastía. Pero de su lado, una noticia negativa no acabó con sus aspiraciones. En el quinto encuentro, Kevin Durant sufrió una lesión que temió lo peor pero que solo lo dejó fuera unos días.

En principio se pensó que el alero era víctima de la rotura del tendón de Aquiles, pero el diagnóstico negó todo.

Aún con su ausencia, Stephen Curry demostró que si Durant es el mejor jugador de la franquicia, es él el más importante.

Sus triples no encuentran punto de comparación, ni siquiera los de Klay Thompson, compañero de labores y otro referente desde la larga distancia.

Curry no será el Más Valioso de la ronda regular, pero tampoco hay dudas de que cuando llega el momento de ponerse la capa de superhéroe y salir a la duela con la misión de anotar para alzar el trofeo de campeón, en el presente no hay muchos basquetbolistas que se le comparen.

Sin despeinarse

Entre las series que culminaron, la más sencilla la protagonizaron Bucks y Celtics de Boston, con los primeros avanzando con comodidad en el ejercicio global, superando a los verdes en cinco encuentros y dejando en entredicho el receso de los de Massachusetts, quienes podrían despedirse de una de sus figuras, el base Kyrie Irving, próximo a tantear el mercado en la agencia libre y aspirante a vestir el uniforme de los Knicks de Nueva York.

Giannis Antetokounmpo, una de las piezas más dominantes de la 2018-2019, no encontró obstáculo, como lo ha hecho a lo largo del calendario, y empujó a los suyos a la instancia previa a las finales, manteniendo vivo el sueño de una escuadra que llegaba con aspiraciones de playoffs al comenzar el curso, pero que en el camino se hizo fuerte y pasó a ser el cuadro a vencer en el Este.

Con el griego siendo figura en las penetraciones, sus compañeros aguardan detrás de la línea de tres puntos para acabar con el rival de turno, fórmula que los llevó a tener el mejor récord en la toda la liga durante la ronda regular.