La Corte Suprema de EE.UU. dictaminó este jueves que una gran cruz erigida, como tributo a los muertos de guerra continúe ubicada en terrenos públicos fuera de Washington, en los suburbios de Maryland.
Una cruz que a según el juez Samuel A. Alito Jr. sí representa un “Símbolo cristiano, pero ese hecho no debe cegarnos a todo lo demás que la cruz de Bladensburg ha venido a representar”.
El magistrado además agregó que “Para algunos, ese monumento es un lugar de descanso simbólico para los antepasados que nunca regresaron a casa. Para otros, es un lugar para que la comunidad se reúna y honre a todos los veteranos de nuestra nación. Para otros aún, es un hito histórico”.
El dictamen se dio a través de una votación de 7 a 2, en la que participaron varios jueces. Las juezas Ruth Bader Ginsburg y Sonia Sotomayor discreparon, mientras que Ginsburg enfatizó su desacuerdo leyendo parte de su disensión desde el estrado.
Ginsburg afirmó que la decisión del tribunal de mantener el monumento en forma de cruz en terrenos públicos “erosiona” el principio constitucional que “exige la neutralidad gubernamental”.
“Hacer de una cruz latina un monumento de guerra no hace que la cruz sea secular. Por el contrario, la imagen de la cruz hace que el memorial de guerra sea sectario. La Peace Cross no es una excepción”, dijo Ginsburg.
Con información de The Washington Post
